La firma alemana planea traer de vuelta a la icónica marca de todoterrenos para entrar a competir en el mercado estadounidense a partir de 2026
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Volkswagen ya tiene socio para su nueva marca Scout: pronto llegará a Estados Unidos
La llegada de la marca Scout al mercado estadounidense, después de varias décadas discontinuada, se hará realidad con la participación de Magna Styer.
Hace un tiempo que se conoció que Volkswagen iba a resucitar una marca que ya utilizó antes en Estados Unidos. Scout era una marca especializada en vehículos pensados para ese mercado y que operó durante los años 60 y 70 del pasado siglo. Aunque sus modelos estaban pensados para triunfar en un mercado donde los pick-ups y los todoterreno eran los más vendidos, no llegó a ser todo lo popular que se necesitaba para mantenerla en activo.
Pero hace solo unos meses, se supo que la marca alemana quería volver a introducirse en el mercado estadounidense, esta vez con vehículos eléctricos, pero pensados para posicionarse en el país. La reintroducción de la marca es la respuesta a la fría acogida que han tenido los modelos eléctricos de Volkswagen, registrados bajo la denominación ID. Ahora, serán los modelos de Scout los que lucharán por hacerse un hueco en Estados Unidos.
Dos modelos para entrar en el mercado de Estados Unidos
La llegada de Scout tendrá lugar con dos modelos. Uno de ellos es un SUV y el otro, un pick-up, ambos totalmente eléctricos. Los dos modelos contarán con una plataforma totalmente nueva, desarrollada para estos nuevos vehículos. Esto quiere decir que no se tendrá en cuenta la plataforma MEB de la compañía, sino que contará con la colaboración de otra empresa que aportará sus conocimientos y experiencia para el desarrollo de estos nuevos vehículos eléctricos.
La otra compañía que participará en esta nueva aventura es Magna Steyr. La empresa es una de la que se consideran secundarias en el sector automovilístico, que se encargan de ofrecer soluciones y elementos fundamentales para los vehículos que luego se comercializan bajo las principales marcas.
Magna Steyr tiene su base en Austria y su función en esta asociación con Volkswagen va a ser dedicarse totalmente a la ingeniería. El acuerdo le va a costar a Volkswagen alrededor de 492 millones de dólares, pero la inversión no queda aquí, ya que la compañía alemana tendrá que modificar las líneas de fabricación de la planta de Carolina del Sur donde se van a fabricar, para ajustarlas a los nuevos modelos.
Con este acuedo, que llevaba en preparación desde hace varios meses, se cierra el primer paso para el regreso de la marca Scout con garantías para posicionarse en un mercado tan complicado y con modelos muy populares como es el estadounidense.
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