Volkswagen llega a un acuerdo sindical que le llevará a reducir la producción en Alemania

Tan solo unos pocos días antes de Navidad, Volkswagen alcanzó finalmente un acuerdo con IG Metall, el principal sindicato en Alemania, que pone fin a la disputa salarial que habían mantenido. De acuerdo con lo firmado por ambas partes, este compromiso supondrá la eliminación de 35 mil empleos en Alemania de aquí a 2030 y una reducción de la capacidad de producción en el país de más de 700 mil vehículos, un buen número de ellos eléctricos.

Después de cinco días de intensas negociaciones, Volkswagen logró sellar este acuerdo justo antes de que llegase la Navidad, evitando así posibles huelgas generalizadas con el comienzo del nuevo año.

La reducción anunciada de 35 mil empleos de aquí a 2030 supera la propuesta inicial de la compañía, que era de 30 mil empleos y que ya causó en su momento bastante malestar entre los trabajadores de Volkswagen, especialmente en la planta principal de Wolfsburgo. Esta reestructuración incluye la eliminación de 4 mil puestos en el área de desarrollo, con el objetivo de poder posicionarse así competitivamente de cara al futuro. Gracias a este acuerdo, Volkswagen estima que podrá lograr una reducción anual de costos laborales de 1.500 millones de aquí a 2030.

En la parte positiva para los empleados fijos de la compañía, Volkswagen garantiza que mantendrá sus puestos de trabajo hasta 2030, aunque muy probablemente las vacantes que surjan no serán cubiertas con nuevas contrataciones. Se han acordado también recortes en bonos y en la participación en beneficios, pero se ha desestimado la reducción salarial del 10 por ciento solicitada por el Consejo de Administración.

Menos vehículos de Volkswagen saldrán de las plantas alemanas

En lo que respecta a la producción, se ha confirmado una reducción de 734 mil vehículos al año en las plantas ubicadas en Alemania. Este reajuste supondrá también algunos cambios en la asignación de modelos a cada planta de producción de Volkswagen en territorio alemán. Así, por ejemplo, el ID.3 y el Cupra Born pasarán a producirse en Wolfsburgo, mientras que el ID.4 se trasladará completamente a Emden. Adicionalmente, la producción del Golf con motor de combustión se trasladará por completo de Wolfsburgo a la planta mexicana de Puebla a partir de 2027.

Por otro lado, la planta de Dresden paralizará definitivamente la producción este mismo año, mientras que Zwickau quedará con una sola línea de ensamblaje, lo que podría afectar su rentabilidad a largo plazo.

Satisfacción en la dirección de la compañía

Tras alcanzarse este acuerdo sindical, Oliver Blume, el actual Director Ejecutivo del Grupo Volkswagen, lo ha valorado como un gran avance para la compañía que dirige ya que, según sus propias palabras, permitirá dar pasos importantes en la planificación futura del grupo. Así mismo, considera que de este modo se garantiza la viabilidad de Volkswagen en un contexto económico desafiante, manteniendo la producción en la mayoría de las plantas y asegurando los empleos hasta 2030.