Vídeo: así de bien te lo puedes pasar en la nieve con el nuevo Subaru BRZ

El mundo de los deportivos está cambiando mucho, mostrando una clara tendencia hacia las nuevas tecnologías y sistemas mecánicos más comprometidos con el cuidado del medioambiente. Esto provoca que sean pocos los que se mantienen fieles a los principios de este complejo segmento, aunque hay marcas lo suficientemente valientes como para gestar vehículos así. Prueba irrefutable de ello es Subaru y su BRZ, deportivo que, aunque no llegue a Europa, está considerado igualmente como uno de los deportivos más puros del siglo XXI.

Para lograr dicha categoría, la firma nipona ha recurrido a una serie de ingredientes indispensables en un deportivo que se quiera acoger a ese exclusivo elenco. Pero es que el nuevo BRZ no solo es apetecible sobre el papel, sino también sobre el asfalto, aunque en este caso sobre la nieve, terreno al que el deportivo japonés ha decidido enfrentarse sin tapujos.

En sus entrañas, el Subaru BRZ 2021 hace gala de un motor muy similar al anterior: un cuatro cilindros atmosférico bóxer de 2.4 litros capaz de desarrollar 231 CV y 250 Nm de par. Dichas cifras se envían única y exclusivamente al eje posterior, y se pueden gestionar por medio de un cambio manual de seis relaciones o, en su defecto, por una caja automática.

Muchos fueron los que criticaron a la anterior generación tanto del BRZ como del GT86 por no desarrollar tanta potencia como se esperaba, pero lo cierto es que ninguna de las dos marcas buscaban crear un vehículo extremadamente potente. Su intención era la de crear un coche de sensaciones y, pese a que en la segunda entrega de ambos deportivos se ha incrementado la potencia, la diversión es factor clave.

Para demostrarlo, el piloto de rallye profesional Takuma Kamada se ha puesto a los mandos del Subaru BRZ en una pista de nieve. Y es que además de mostrar en todo momento motricidad, Kamada también ha dado constancia de lo bien que te lo puedes pasar a los lomos del deportivo japonés. Una serie de derrapes ayudan a dar forma a esta afirmación, aunque claro está que las buenas manos del piloto japonés ayudan a redondearla aún más.

Sea como fuere, el Subaru BRZ -y por ende el Toyota GR86- tiene todas las papeletas para consagrarse como uno de los deportivos del momento. Y es que en un sector automovilístico orquestado por unas normas que abogan por el cuidado del planeta, resulta complicado encontrarse con vehículos «políticamente incorrectos» como este que hoy nos ocupa.