Valencia Street Circuit: primeras impresiones

Gracias a Dunlop y su programa Quiero Ser Piloto este fin de semana hemos estado en el Valencia Street Circuit hablando con pilotos, paseando por el paddock, sacando conclusiones con nuestros propios ojos y, por supuesto, viendo las carreras de International GT Open en la categoría GTA.

Antes que nada comentar que se ha aprovechado parte de la infraestructura de la America’s Cup, lo que ha significado reducir sus costes e inversión inicial a tan sólo 90 millones de euros. La longitud total del trazado es de 5.473,5 metros con un total de 25 curvas (11 a izquierdas y 14 a derechas) y una velocidad máxima y mínima estimada de 323,3 y 95,2 km/h respectivamente con una media de 201,3 km/h, invirtiendo un tiempo de algo menos de 1 minuto y 40 segundos.

Tras los datos de rigor, lo primero que decidimos fue ponernos en la situación de cualquier asistente al GP de F1 y ver las posibilidades reales de entrar por alguna de sus 8 puertas en búsqueda de aparcamiento. La principal, por la que entramos nosotros, está situada al final de la Avenida del Puerto, una calle de 5 carriles que desemboca como su propio nombre indica en el puerto y que encontramos cortada 2-3 manzanas antes de llegar al final. Esto nos obligó a tomar una calle perpendicular donde se podía encontrar sitio fácilmente. En todo caso, la entrada recomendada es la A o en todo caso la B.

Tras andar escasos 10 minutos, nos encontramos con la recta de tribuna y la gran curva rápida al final de ésta. Para este evento en cuestión, no existía entrada, ya que a escasos 20 metros de la valla que separa el circuito, encontrábamos un muro a la altura de las rodillas que nos impedían acercarnos más, pero siempre con visión directa al circuito bastante buena.

Para los más aventajados, existen varios aparcamientos numerados y localizados con colores para dejar su vehículo, cuanto más aventajado seas, más cerca al paddock y las tribunas estarás. Por supuesto esto es lo que nos encontramos, pero no tiene porqué repetirse en las carreras de F1. Desde estos aparcamientos existía un shuttle que iba parando por los diferentes puntos de interés, por lo que no era necesario andar en exceso.

Una vez dentro, todo nos recuerda a la America’s Cup, ya que se conservan las fachadas pintadas de los edificios de los Challengers y que se reutilizan para salas de convenciones, terrazas o edificios de la Organización.

Lo que nos interesaba eran los box de cada uno de los equipos y no nos faltaron. Pudimos entrar a ver de cerca cada uno de los coches participantes, pudimos charlar con pilotos y también preguntarles acerca del nuevo trazado y, como no, ver de cerca cómo es el ambiente (y la intensidad) de trabajo en un momento previo a la carrera. Todo son nervios, últimos ajustes para los coches, dejar todo preparado para que funcione sobre el asfalto y sólo preocuparse de adelantar a cuantos más coches mejor. El objetivo: ser los primeros en ver la bandera de cuadros.

En uno de esos descansos, pudimos hablar con Miguel Angel de Castro, y le preguntamos acerca del nuevo circuito. Como es lógico en un circuito nuevo, se ha tenido en cuenta las necesidades del momento actual, pero también tiene que pensarse para que les guste a los pilotos, sea fácil y, lo más importante, que haya escapadas de seguridad. Por supuesto no ha defraudado.

La sensación en el paddock y en los pilotos que han podido probarlo en sus propias carnes no puede ser mejor. En palabras de Castro, se trata de un trazado muy completo. Hay curvas lentas y rápidas (sin ir más lejos la última y primera respectivamente), pero también es un circuito divertido y en la que hay que tener los frenos adecuados, ya que es un constante arrancar y frenar por lo que desgasta mucho los mismos. Sin duda parece que este nuevo trazado le ha traido suerte al avulense, ya que recordemos que remontó 7 puestos y cruzó 7º la línea de meta.

Para terminar, y como nota negativa, falta bastante por hacer en este mes. Hay muchas cosas provisionales, todo es muy nuevo y se pasa cierto calor cuando se está al sol, pensando que será en pleno agosto en Valencia cuando se dispute el Gran Premio de F1. No creo que haya que poner neumáticos de mojado.

Fotos | Highmotor