Uno de los «Google Car», envuelto en un accidente de tráfico
El gigante americano Google cuenta, entre sus múltiples proyectos, con uno enfocado al futuro de la movilidad personal. Se trata de una flota de «Google Car», vehículos equipados con sistemas de conducción autónoma. Hoy, uno de esos turismos inteligentes ha sufrido un accidente con tres heridos, afortunadamente ninguno de ellos de gravedad.
El gigante americano Google cuenta, entre sus múltiples proyectos, con uno enfocado al futuro de la movilidad personal.
Se trata de una flota de «Google Car», vehículos equipados con sistemas de conducción autónoma. Hoy, uno de esos turismos inteligentes ha sufrido un accidente con tres heridos, afortunadamente ninguno de ellos de gravedad.
El «Google driverless car» es un proyecto de la empresa estadounidense, con varios años a sus espaldas, que pretende profundizar en el siguiente paso de la movilidad personal, la conducción autónoma. Se trata de vehículos normales a los que Google les adapta sus sistemas de cámaras y radares para que conozcan exactamente su situación respecto al entorno que los rodea.
Actualmente, estos vehículos, normalmente montados sobre coches de Toyota o Lexus, continúan circulando por las calles de diversos estados americanos, entre ellos Nevada, que a mediados de 2011 aprobó una ley que permitía su circulación por carretera abierta. En total, ya son más de 2.5 millones de km recorridos por estos vehículos, pensados fundamentalmente para terrenos como las autopistas.
Sin embargo, la noticia de hoy hace referencia a un pequeño contratiempo que la compañía americana ha tenido con uno de sus coches, ya que se ha visto implicado en un accidente -el decimocuarto- en el que ha habido heridos, aunque afortunadamente, según la propia Google, ninguno reviste gravedad.
Parece que un Google Car -basado en un Lexus RX450h- circulaba con normalidad por las calles de Mountain View, California, cuando en una intersección, pese a tener el semáforo en verde, se paró, ya que aún no había pasado toda la circulación de su derecha, lo que le obligaría a detenerse en medio de la intersección.
Por ello el coche de Google se detuvo a esperar, algo que no advirtió el conductor que circulaba justamente detrás, que no frenó a tiempo y terminó por colisionar a 27 km/h contra el coche de Google. Afortunadamente, ninguno de los 3 ocupantes del Lexus han sufrido heridas de gravedad.
Google afirma que, al igual que en los demás accidentes sufridos por sus coches autónomos, el fallo es atribuible al ser humano, lo que nos deja en un lugar un tanto dudoso a los que circulamos con asiduidad por las calles de nuestra ciudad y por las autopistas de nuestro país.
Fuente | businessinsider.com
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