Uber y Volvo, en busca del coche autónomo

Los años que van a llegar son apasionantes. Nuevos modelos de movilidad que no dependen de combustibles fósiles, conducción autónoma… Los nuevos modelos de coches van a hacernos experimentar un gran adelanto para todos y las principales marcas quieren estar a la cabeza de los adelantos. Volvo no quiere quedarse atrás y está trabajando también en los sistemas de apoyo a la conducción que darán como fruto coches capaces de conducirse por sí solos, pero no quiere hacerlo solo.

La marca sueca se ha aliado con Uber, que está buscando añadir a sus servicios de movilidad compartida la posibilidad de tener coches autónomos sin conductor. Según el acuerdo, Volvo fabricará los vehículos base y será Uber quien los comprará para desarrollar los sistemas de conducción autónoma que está investigando en estos momentos.

Uber cuenta con un sistema propio que incorporará a los coches de Volvo, mientras que la marca sueca utilizará sus propios sistemas. Eso sí, se espera que haya un canal de comunicación abierto entre ambas empresas, de manera que los resultados de una de ellas servirá para alimentar la investigación de la otra. Ambas partirán del mismo coche, por lo que las soluciones probablemente sean muy similares.

La base sobre la que partirán ambas compañías es la arquitectura escalable de productos (SPA), que es totalmente modular. Con esta plataforma, que está considerada como una de las más avanzadas del mundo y que está presente en el XC90 SUV y otros modelos de Volvo, los suecos ya tenían en mente el desarrollo de la conducción autónoma. Ahora, servirá de base para una nueva etapa en el desarrollo de esta tecnología, que con la colaboración firmada entre estos dos importantes actores de la industria automovilística y tecnológica, tendrá un buen empuje para llegar a ser una realidad a mitad de la próxima década.

Fuente | Volvo