Conducir un coche eléctrico es una gran opción para reducir las emisiones contaminantes, pero hay que hacerlo de manera correcta para tener todo su rendimiento.
¿Tu coche tiene start-stop? Esto es todo lo que tienes que saber
El sistema Start & Stop se desarrolló en los años 70, pero no fue hasta el año 1983 cuando se utilizó en un modelo de producción y ha llegado hasta hoy.
En la actualidad son muchos los modelos que cuentan con un sistema de Start & Stop, es decir, un sistema que para el motor cuando el coche no está activo y lo reactiva cuando se pisa el acelerador para reiniciar la marcha. Un elemento que permite un ahorro considerable de combustible y que además reduce las emisiones contaminantes cuando el coche está detenido. Pero, ¿qué más sabemos del sistema Stop-Start?
Un invento con 50 años
Aunque parezca una tecnología reciente y muy nueva, realmente se presentó a finales de los años 70 en un coche conceptual de Toyota. Pero el primer coche que equipó de serie este sistema fue el Volkswagen Polo en 1983. Desde entonces ha experimentado varias mejoras y se ha ido convirtiendo en un sólido aliado para los conductores que quieren ahorrar combustible y tener un coche mucho más verde y sostenible.
¿Cómo funciona el sistema Start & Stop
?
El funcionamiento del Start & Stop es bastante sencillo. Un factor clave para que funcione este sistema es la temperatura de funcionamiento del motor. Si el motor no alcanza esta temperatura, el sistema no funcionará. Una vez el motor alcanza esa temperatura adecuada, funcionará sin problemas y no provocará un mayor consumo de combustible cuando arranque de nuevo. No funcionará si la temperatura del motor no supera los 20ºC, aunque en algunos modelos esta temperatura de servicio es de 50ºC
Al detener el coche y mantener el freno pisado el sistema detecta que el coche está parado e interrumpe la alimentación del motor. En ese momento, la alimentación de los distintos elementos eléctricos del coche, como las luces y la radio pasa a depender de la batería. En cuanto se levanta el pie del freno, el motor de arranque recibe electricidad y pone en marcha el motor.
Otras maneras de indicar al sistema que se inicia la marcha es engranar una marcha, pisar el embrague o girar el volante. Con estas acciones se transmite la señal para reanudar la marcha. De esta manera se consigue ahorrar cierta cantidad de combustible y al no tener el motor en marcha, se reducen las emisiones de gases contaminantes.
Algo importante para poder disfrutar de las ventajas del Start & Stop y eso es el nivel de la batería. Es fundamental que esta tenga un nivel bastante elevado para poder activar el motor de arranque. Si la batería no tiene suficiente carga, el sistema se desconectará y no funcionará.
Tampoco funcionará si el aire acondicionado está a máxima potencia, ya que este requiere mucha energía para funcionar. Si la temperatura ambiental es inferior a los 3ºC tampoco funcionará. Algunos sistemas Start & Stop detectan si no se lleva el cinturón de seguridad y no reactivan el motor.
Para desconectar el sistema Start & Stop hay un pulsador en el salpicadero, aunque esta desconexión es solo temporal y cada vez que se vuelva a poner en marcha el coche se debería volver a desconectar. Es un buen aliado para la conducción por ciudad y permite un ahorro que se puede cifrar en un 5% de manera general.
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