¿Te parecía caro el nuevo Toyota Supra? Pues preparáte para conocer el precio que puede alcanzar el Supra MK4

El Toyota Supra, uno de esos deportivos idolatrados por muchos y odiados por muy pocos. Fue a lo largo de este año 2019 cuando la casa nipona por fin desveló a la quinta generación de este emblemático vehículo que se había despedido de nosotros en el 2002. Tras conocer la coalición de Toyota con BMW y la necesidad de pegar 69.000 euros si queremos hacernos con un Supra de quinta generación, los más aficionados pusieron el grito en el cielo.

Seguro que después de conocer el desembolso que uno tiene que afrontar para alegrar nuestro garaje con la presencia del deportivo japonés pensaste en indagar por el mercado de segunda mano en busca de alguno de los ancestros del Supra. Pues ya os adelantamos que la cosa no mejora y que el precio que pide Toyota por su deportivo se convierte en asequible si lo comparamos con unidades del MK4 como la que hoy nos ocupa.

Y es que el Toyota Supra se ha convertido en un vehículo de culto después de su aparición en la saga de Fast and Furious, donde también ganó una abrumadora fama uno de sus principales rivales, el Nissan Skyline GT-R R34. En la actualidad, son numerosos los propietarios de un Supra de cuarta generación los que han recurrido a piezas de aftermarket para modificarlo y hacerlo más potente, pero si eres el afortunado propietario de uno y quieres multiplicar su valor te aconsejamos que lo dejes de estricta serie.

Esto nos lo demuestra este Toyota Supra de 1998 que, con apenas 60.000 kilómetros recorridos, ha conseguido alcanzar un valor inimaginable hace 21 años. Y es que el deportivo japonés levanta pasiones por allá por donde pase, pero lo cierto es que el hecho de mantenerlo tal y como salió de la fábrica puede resultar muy beneficioso pese a lo tentador que parezca exprimir hasta el último ápice de deportividad de su seis cilindros, uno de los motores más potenciables del mundo.

El vehículo que hoy nos atañe mantiene intacto el esquema mecánico con el que Toyota lo concibió, lo que arroja aún más exclusividad. Estamos ante un propulsor de seis cilindros en línea de 3.0 litros biturbo capaz de generar 330 CV y 440 Nm de par, cifras que permitían que el Supra se catapultase hasta los 100 km/h en 5,1 segundos y una velocidad máxima de 282 km/h sin limitador.

El hecho de haber mantenido inalterado hasta el más mínimo detalle de este Toyota Supra permite a su vaticinador propietario pedir por el deportivo nipón la friolera de 499.999 dólares, lo equivalente a 450.000 euros al cambio. Sin lugar a dudas, es una apabullante cantidad de dinero que provoca que la cuarta entrega del Supra sea mucho más especial y esté más valorada de lo que uno podría considerar a priori.