Toyota Highlander: un SUV híbrido entre los grandes

El Toyota Highlander de cuarta generación ya está disponible en la red de concesionarios a partir de 52.000 euros. Se trata del modelo más grande de la marca, un SUV híbrido desarrollado a partir de la plataforma GA-K del Toyota Camry y Rav4, de 4,95 metros, dotado de siete plazas. Cuenta con sistema de tracción total eléctrica, como en el caso del Rav4 4×4, e incorpora un motor de 2.5 litros y 190 CV al que se le asocian dos motores eléctricos de 40 y 134 kW, con lo que el conjunto puede suministrar una potencia máxima de 247 CV y tracción a las cuatro ruedas.

Los responsables de la marca quieren posicionarlo como un SUV de lujo del segmento E, más refinado y cómodo que un todoterreno puro como el Land Cruiser. Aunque se trata ya de la cuarta generación del modelo, es la primera vez que se importa desde Estados Unidos a Europa, donde se vende exclusivamente con sistema de hibridación eléctrica.

El planteamiento de la marca para el posicionamiento del modelo en nuestro mercado se basa en cuatro pilares: estilo, espacio interior, respeto al medioambiente y tecnología innovadora.

Así, aunque cuenta con unas dimensiones exteriores muy llamativas, en el entorno de los cinco metros, sus formas redondeadas y estilizadas (4,99 m de largo, 1,93 m de ancho y 1,75 m de alto) no lo presentan como un vehículo aparatoso. Sin embargo, es 36 cm más largo que un Rav4, con el que comparte muchos de sus componentes mecánicos.

Toyota Highlander: muy amplio y equipado

El interior, con siete plazas dispuestas en tres filas de asientos, es muy amplio –especialmente en las dos primeras filas- y ofrece buen acceso. La banqueta de la segunda fila de asientos es deslizable y permite desplazarlos 18 centímetros, de forma que la capacidad del maletero puede variar entre 268 litros, con las siete plazas practicables; 658 litros, si se utilizan 5 plazas o bien 1.909 litros si necesitamos la máxima capacidad de carga con solo dos plazas.

Todas las versiones cuentan con sistema de acceso y arranque sin llave, faros delanteros led, climatizador de tres zonas y cargador inalámbrico de teléfonos móviles. El cuadro de instrumentos dispone de pantallas TFT informativas y multimedia, de 8 pulgadas para el acabado Advance, y de 12,3 pulgadas en el nivel de equipamiento Luxury, con funciones muy sencillas de manejo y mandos de grandes dimensiones.

Incluye llantas de aleación de 20 pulgadas, luneta posterior oscurecida o parasoles traseros laterales.

El acabado Luxury añade tapicería de cuero perforado, asientos delanteros calefactados y con ventilación, portón trasero eléctrico accionado mediante un sensor, volante calefactado, Head-up Display de 10,1 pulgadas, retrovisor interior inteligente y pantalla multimedia táctil de 12,3 pulgadas en la consola central, para controlar el sistema navegación por satélite, así como el equipo de sonido JBL Harman de 1.200 W con 11 altavoces y una cámara de visión 360°. Opcionalmente se ofrece el techo solar panorámico con sistema de protección anti atrapamiento para el acabado Advance.

Entre las ayudas a la conducción destacan el sistema precolisión con actuación en caso de desvío de vehículo que circula en dirección contraria, dispositivo de asistencia en el volante para facilitar las maniobras evasivas, asistencia de giro en cruces, frenado de emergencia con detección de peatones y ciclistas, programador de velocidad activo, alerta de cambio involuntario de carril, sensor de aparcamiento con freno automático, sistema de reconocimiento de señales, control de crucero adaptativo o cambio automático de luz de cruce y carretera.

Toyota Highlander: híbrido no enchufable

A diferencia del Rav4, que en breve contará con una mecánica híbrida enchufable (la misma que pudimos probar en el Suzuki Across), el Highlander no tendrá la posibilidad de apoyarse en una fuente de alimentación externa, al menos, de momento.

Incorpora un motor de gasolina de cuatro cilindros y 2,5 litros de cilindrada –de ciclo Atkinson con inyección directa e indirecta de combustible-, un motor eléctrico delantero de 134 kW y otro trasero de 40 kW, alimentados por una batería de hidruro de níquel, que proporciona 1,9 kWh. El sistema permite circular en modo completamente eléctrico hasta 125 km/h y ofrece una capacidad de remolque de dos toneladas.

Emplea el motor eléctrico trasero para mejorar el inicio del movimiento y proporcionar tracción a las cuatro ruedas, pero si los sensores no detectan pérdidas de adherencia, el eje posterior se desconecta. En caso de falta de motricidad, el eje posterior apoya al conjunto para mejorar la adherencia, y también en el caso de seleccionar la modalidad “Trail” para circular por pistas.

La tracción total inteligente se apoya en el motor eléctrico trasero, de 40 kW de potencia, que ofrece 121 Nm de par máximo y es capaz de transmitir hasta 1.300 Nm a las ruedas traseras. La distribución del par entre las ruedas delanteras y traseras se controla electrónicamente, y puede variar el reparto entre 100-0 y 20-80, dependiendo de las condiciones de la conducción y el estado del firme. Además, la entrega de par distribuida entre las ruedas delanteras y traseras se visualiza en la pantalla del cuadro de instrumentos cuando se activa el sistema de tracción total.

Toyota Highlander: fácil de conducir

La altura libre al suelo es de 202 mm que, junto a una batalla de 2,85 metros, le otorga un comportamiento muy aplomado en pistas y en asfalto. Es un coche fácil de conducir, todos los movimientos son suaves y dulces. La dirección es muy agradable (monta el servomotor en la cremallera, no en la columna de dirección). Tampoco cuenta con unas suspensiones muy firmes, lo que lo convierte en un modelo muy agradable para circular por terrenos deteriorados.

Mediante el control de selección del modo de conducción se puede elegir: Eco, Normal o Sport, y se pueden utilizar también cuando se circula en modo EV, si bien las diferencias no son muy apreciables. Si no se abusa del acelerador, el movimiento se transmite de forma suave y silenciosa, pues el variador continuo permite ir ganado velocidad conforme aumenta el régimen del motor, pero si se actúa con decisión sobre el pedal del gas, el régimen de giro del motor aumenta más que la velocidad del vehículo.

A pesar de las llamativas dimensiones, con cinco metros de longitud y más de dos toneladas de peso, las cifras de consumo se encuentran en valores racionales, en el entorno de los 8,5 litros/100 km.