¿Será el nuevo Toyota GR Yaris aliciente suficiente para que otras marcas hagan algo similar?

La década de los 90 y de los 80 fueron la época dorada del automóvil, en la cual reinaban coches que no temían a las duras normas anticontaminación que hoy en día caldean el ambiente. Por aquel entonces, fueron numerosas las marcas que tuvieron que sacar al mercado variantes de producción de sus vehículos de carreras para poder homologarlos para rally, lo que dio pie a modelos tan emblemáticos como el Lancia Delta S4 o el Ford RS200. Ahora, la historia se repite de la mano de Toyota y su pequeño -pero matón- GR Yaris, variante que nace con el mismo cometido que esos ilustres vehículos que acabamos de mencionar.

Hace no muchos días, analizamos que el nuevo utilitario deportivo de la firma nipona camparía a sus anchas en el mercado por culpa de no tener un rival directo. No obstante, la concepción del GR Yaris podría servir como aliciente suficiente para que otras marcas no solo se animasen a volver a los rallys, sino también a crear vehículos de producción de similar corte al japonés para poder homologar a su correspondiente variante de carreras.

Con esta premisa, no sería descabellado esperar a marcas como Volkswagen o Suzuki poniendo en marcha la creación de variantes del Polo o el Swift mucho más radicales. La casa alemana ya hizo un amago de esta idea con el Polo WRC, una variante que buscaba simular a un siempre deseado Polo R y, pese a que no era tan radical como el GR Yaris, dio mucho de que hablar.

Ford también podría aprovechar la buena base que ofrece el Fiesta ST para desarrollar una versión más deportiva si cabe en busca de rendir homenaje a aquellos RS200 y Cosworth que militaron en antaño. Audi es otra marca que sacó músculo con el A1 Quattro, versión de su utilitario que, sin lugar a dudas, evocaba a aquel Audi Quattro que tan buenos resultados dieron junto a Walter Röhrl.

De momento, es aventurado confirmar la producción de vehículos capaces de hacerle sombra al Toyota GR Yaris. No en balde, estamos seguros de que varias marcas serán las que tomen cartas en el asunto después del movimiento realizado por la casa japonesa y busquen poner en apuros a este nuevo vehículo que, con su inusual rebeldía, ha conseguido enamorar a una mayoría.

Sea como fuere, la tensión se puede palpar pese a que el GR Yaris acaba de ser presentado y que su paso por el mercado es aún escaso. Sin embargo, estamos casi seguros de que otras marcas no tardarán mucho en responder con modelos capaces de traer de nuevo a esa época tan entrañable y arropados con la tecnología suficiente para no causar estragos en el medioambiente.