Toyota se adelanta al futuro potenciando la electrificación

Durante la edición del segundo Kenshiki Forum, Toyota ha desvelado sus planes de futuro centrados en la electrificación y en la conversión de la compañía en proveedor de movilidad a todos los niveles. Es cierto que 2020 ha sido un año especialmente complicado para los fabricantes de automóviles y, aunque las ventas de Toyota en Europa se han reducido a 975.000 unidades, el descenso ha sido del 10% frente al 22% que ha registrado la media de la competencia, lo que ha permitido ganar cuota de mercado.

La fortaleza del grupo empresarial y los planes de expansión con nuevos modelos electrificados permiten augurar a los responsables de la compañía unas ventas europeas en el entorno de 1,1 millones entre Toyota y Lexus en 2021 y de 1,4 millones de unidades en 2025, además de lograr una significativa reducción de emisiones de CO2. De hecho, más del 60% del total de ventas de Toyota y el 96% de Lexus en Europa occidental y central son modelos electrificados.

La previsión de crecimiento de la demanda mundial de modelos híbridos -incluido enchufables- para los próximos años se estima en un 600%. Por ello, Toyota desarrolla una batería de nuevos productos, con más de 60 productos electrificados nuevos o actualizados en Europa para los próximos cinco años; al menos 10 de ellos serán eléctricos puros o dotados de pila de combustible de hidrógeno. Para el año 2025 la marca contará con más del 70% de modelos híbridos, más del 10% de híbridos enchufables y más del 10% de vehículos sin emisiones (entre eléctricos puros y de pila de combustible de hidrógeno).

El hidrógeno, la clave para el futuro

El objetivo de reducción de emisiones para 2030, previsto inicialmente en un 37,5% llegará al 50%, según afirmó Johan Van Zyl, presidente y consejero delegado de Toyota Motor Europe durante la celebración del foro anual. Para ello está potenciando las inversiones en tecnología de pila de combustible, no solo para aplicaciones en automoción, sino también para su utilización en actividades industriales. La creación de un nuevo grupo empresarial con socios en Europa, que trabaja en estrecha colaboración con gobiernos nacionales y regionales, permitirá acelerar el crecimiento de su implantación y abaratar los costes, pudiendo llegar a multiplicar por 10 su implantación a corto plazo.

La ventaja de este “combustible” ilimitado, a diferencia de otras energías renovables que son por naturaleza intermitentes, es decir, no siempre se puede producir electricidad donde se necesita ni cuando se necesita, se encuentra en su facilidad de transporte y en su almacenaje.

Actualmente está lista la comercialización de la segunda generación del Toyota Mirai con pila de combustible, además de contar ya con carretillas elevadoras, autobuses y generadores alimentados por hidrógeno y se estudia su aplicación en trenes y barcos. Según revelan las cifras técnicas del Mirai, su autonomía está en torno a los 650 km, su repostaje requiere apenas cinco minutos y el precio de comercialización en Alemania está en 65.000 euros. Si lo comparamos con un vehículo 100% eléctrico equivalente con batería de 100 kW, su precio rondaría los 77.000 euros; el tiempo de recarga en un supercargador llevaría más de una hora y más de 50 horas en un punto de recarga doméstico.

La intención de Toyota se centra en la generalización del uso del hidrógeno para la próxima década, aunque sólo algunos países europeos, como Noruega, Alemania o Francia cuentan con una red avanzada. Holanda, Polonia y Reino Unido también están apostando fuerte por esta tecnología, lo que permitirá una expansión rápida de las infraestructuras. En España contamos con una muy baja cobertura, menos de una decena de estaciones en toda la península, lo que hace más difícil la implantación de esta tecnología, si bien algunos fabricantes, en colaboración con la Asociación Española del Hidrógeno, están promoviendo iniciativas para su desarrollo.

Nuevo SUV 100% eléctrico

Otra de las noticias desveladas por la compañía es el lanzamiento de un nuevo SUV de tamaño medio basado en la nueva plataforma escalable e-TNGA, compartida con Subaru, que se desvelará el próximo año y que podría llegar al mercado a comienzos de 2022. No se conoce aún el nombre, aunque se ha confirmado que se producirá en la planta ZEV de Japón y será comercializado en Europa.

El principio de esta arquitectura se basa en la flexibilidad y en su diseño escalable, ya que permite el desarrollo de versiones de tracción delantera, trasera o total y acoplar en su zona central diferentes tamaños de batería.

En la actualidad, Toyota está trabajando con diferentes proveedores de acumuladores, como BYD y Panasonic, aunque también están investigando nuevos tipos de batería con la intención de aumentar el suministro y reducir los costes, como las de estado sólido, que permiten mayor capacidad, menor peso y, sobre todo, una mayor velocidad de recarga. Se estima que antes de 2025 pueda producirse en serie el primer vehículo electrificado con este tipo de tecnología.

El próximo año llegarán también nuevas versiones híbridas, como el Yaris Cross y el Highlander, un SUV de grandes dimensiones y tres filas de asientos.

Aunque la marca ha sido algo reacia en el desarrollo de vehículos 100% eléctricos, explican que ahora que la demanda empieza a crecer y, gracias a la experiencia acumulada desde 1997 en modelos electrificados, ha llegado el momento de ofrecer con garantía este tipo de tecnología. De la mano de otros socios como el Grupo PSA ha venido la Proace y en 2021 se ofrecerá también la furgoneta eléctrica Proace City.

Movilidad a todos los niveles

El origen de Toyota se remonta al deseo de Sakichi Toyoda de facilitar la vida a su madre, una mujer que trabajaba con un telar hasta altas horas de la noche. A partir de esa motivación desarrolló el telar automatizado y nació Toyota. Ahora esa filosofía se ha trasladado más allá de la fabricación de automóviles con la intención de “ofrecer felicidad a todo el mundo”, por lo que la orientación de la compañía no se centra solo en la fabricación de automóviles sino de convertirse en un proveedor de movilidad. Y esa nueva “cultura” pasa por el transporte personal, la robótica o el desarrollo de dispositivos que faciliten la vida a personas con movilidad reducida.

Un paso más allá se encuentra la división orientada a los servicios de movilidad, denominada Kinto, centrada en ofrecer suscripción de vehículos, vehículos compartidos, trayectos compartidos, etc. Pensando en que el paso de la propiedad al uso seguirá tomando impulso, se ofrecerán diferentes servicios de uso por minuto, por día, mes, año o para siempre, apoyándose en la red de concesionarios.

La nueva compañía se lanzará el próximo mes de abril para implantarse en diversos países europeos, si bien París será el objetivo más ambicioso para ejercer como socio de movilidad en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2024.

Nueva tecnología de transmisión Lexus Direct4

Hacer que sus coches sean más divertidos de conducir y logren mayor rendimiento dinámico es otra de las intenciones de la división de lujo de la compañía japonesa, también centrada en la electrificación en sus diferentes vertientes, como hibridación o eléctrico puro. No obstante, no se descarta la implementación de híbridos enchufables a corto plazo y también la pila de combustible de hidrógeno en un futuro más lejano.

Lo que parece más inmediato es el sistema de transmisión Direct4, un dispositivo que permite el control de par instantáneo a las cuatro ruedas, en función de las condiciones de conducción y de las intenciones del conductor. Pensado para controlar la entrega de par desde los motores eléctricos delanteros y traseros, ajusta automática e instantáneamente la entrega de par a los ejes, permitiendo cambiar completamente el carácter del coche, haciéndolo intuitivo y divertido de conducir. El sistema funciona de forma automática y modifica los parámetros de conducción en función de las características del trazado.

Según los responsables de la marca, los modelos futuros de Lexus no tendrán tantas limitaciones en diseño, ya que los vehículos eléctricos no requieren un frontal con refrigeración, lo que permitirá definir líneas tridimensionales más libres e impactantes.