Tesla recibe el «Okey» de las autoridades alemanas para la ampliación de Giga Berlín

El fabricante norteamericano ha recibido luz verde para la ampliación de la Gigafabrica situada en Grünheide, cerca de Berlín. La agencia estatal de medio ambiente ha otorgado una autorización parcial, que permitirá a la compañía incrementar su capacidad de producción en esta ubicación.

De acuerdo con las autoridades alemanas, esta primera autorización parcial incluye, entre otras cosas, la construcción de un nuevo gran hangar para alojar unidades de producción adicionales; así como también la modificación y optimización de las instalaciones de producción ya construidas.

Por el momento, no queda claro sin embargo cuántos vehículos más podrá producir Tesla en Giga Berlín una vez completada esta ampliación. En el informe del segundo trimestre de 2024, Tesla mencionó una capacidad actual de producción de 375 mil vehículos al año en Giga Berlín, donde actualmente solo se ensambla el Model Y. No obstante, su capacidad máxima se sitúa en el medio millón de unidades, y desde hace tiempo el fabricante norteamericano ha repetido que su ambición es llegar en un futuro a alcanzar el millón de vehículos.

Es importante señalar que esta autorización parcial afecta solo a las áreas que Tesla ya posee, por lo que no se verán afectados los bosques que rodean la planta.

Tesla se topa una vez más con la conocida burocracia europea

Lograr esta autorización no ha sido, por otro lado, tarea sencilla. Tesla presentó la solicitud de ampliación a la Oficina Estatal de Medio Ambiente el 15 de marzo de 2023 para comenzar la expansión de la planta. Es decir, hace más de año y medio. Paralelamente, se solicitó dividir el proyecto de ampliación en varias secciones de autorización parcial, ya que se consideró que este procedimiento debería ser más efectivo.

Esta primera autorización parcial, ahora concedida, solo confirma la aprobación de tareas que ya se habían iniciado anteriormente, ya que Tesla recibió una aprobación preliminar en julio para comenzar la construcción del gran hangar y optimizar las instalaciones existentes antes de lo previsto. No obstante, si el proceso de aprobación de control de emisiones hubiese tenido un resultado negativo, el fabricante norteamericano habría tenido que paralizar las tareas ya iniciadas.