Model 3 Tesla Coches Eléctricos Vídeos
No, no insistas: echarle gasolina a un Tesla Model 3 no es una buena idea
Hoy nos encontramos con una cómica situación en la que un joven acude a abastecer a su Tesla Model 3… a una gasolinera. ¿El resultado? Frustración pura y dura
Las nuevas tecnologías pueden llegar a ser abrumadoras, imponentes e incluso un poco liosas; pero poco a poco conseguimos adaptarnos. En esta misma tesitura se encuentra nuestro protagonista de hoy: un joven norteamericano que, mientras intentaba nutrir a su Tesla Model 3 con gasolina, se ha convertido en motivo de risa del vehículo precedente. Y es que aunque parezca una venganza como la de aquel Club Tesla croata que atiborró una gasolinera con coches eléctricos, lo cierto es que estamos ante otro de muchos casos en los que se ve la falta de costumbre a enchufar nuestro coche como si de un smartphone se tratase.
Pese a que nuestro objetivo no es la de mofarnos con el vídeo que hoy nos ocupa, no podemos evitar admitir que la situación resulta cuanto menos cómica. Tal y como apuntan los encargados de filmar dicho momento, hay dos posibles escenarios: el coche es nuevo y aún no se ha familiarizado con él; o el coche no es suyo y no tiene ni pajolera idea de que la electricidad es el único sustento de los Tesla.
Nos percatamos de la seguridad del joven tras acercarse al surtidor, insertar su tarjeta y proceder con lo que sería un repostaje al uso con cualquier otro coche. Sin embargo, la confusión nace en nuestro protagonista al darse cuenta de que la boca del depósito cuenta con numerosos orificios, y ninguno de ellos parece ideado para introducir la manguera de la gasolinera.
Anonadado por la situación tan rocambolesca con la que se ha topado, vuelve a acudir al habitáculo en busca de otro botón que libere el verdadero compartimento para abastecer de gasolina al Tesla. «Nada por aquí, nada por allá», piensa este muchacho que, ni corto ni perezoso, decide acudir al maletero en busca de intentar averiguar dónde puede encontrarse la dichosa boca del depósito.
Pero el momento álgido de esta caricaturesca situación llega cuando abre el capó y, para su sorpresa, se encuentra con que no hay motor. La desesperación del joven le lleva a consultar en internet cómo diantres echarle gasolina a un Tesla, pero la respuesta es la evidente: es un coche eléctrico.
Pese a que nos hemos destornillado con este escenario, también aprovechamos para darle un pequeño tirón de orejas a los que graban, puesto que podrían haberle ahorrado sufrimiento al dueño de este Tesla Model 3 que no volverá a pisar nunca más una gasolinera. ¿Moraleja? Si el coche no es tuyo, no olvides preguntar a su propietario qué debes echarle en caso de que le entre hambre por el camino.
Deja un comentario