Hace tiempo que varias marcas quieren ir prescindiendo de los mandos en la pantalla táctil a favor de los mandos físicos y este estudio confirma esta tendencia.
La tecnología pone en entredicho la confianza de los usuarios de coches de lujo
Según estudio realizado por J.D. Power, la tecnología de los coches premium ofrece confianza al conductor pero solo si es eficiente y demuestra que funciona.
La confianza que los compradores ponen sobre los coches nuevos es algo fundamental que marca el estado del mercado y que permite saber cómo perciben estos a los vehículos que están a su alcance. Y esta confianza es lo que han medido en un estudio realizado por J.D. Power, una empresa especializada en estudios de mercado acerca de la industria de automoción.
En este estudio se ha realizado una comparativa entre las expectativas de los compradores de coches estándar, premium y de lujo. Y si bien la confianza y la experiencia de uso es mayor cuanto más básico es el modelo de coche a estudiar, más crece la desconfianza en los vehículos de lujo y su equipamiento.
Por ejemplo, tras el estudio, se ha detectado que la diferencia entre una marca como KIA y Tesla es la más alta en los últimos 34 años. No entre la marca estadounidense, claro, porque en ese momento no existía, pero sí sirve como ejemplo entre un coche de gama estándar y uno de gama alta.
La falta de confianza está marcada sobre todo por el sistema de información y entretenimiento y la tecnología instalada en estos vehículos. Los sistemas tecnológicos más avanzados suelen estrenarse primero en los vehículos premium y estos son los primeros en beneficiarse de los mismos, por lo que a prioir resultan más fiables para los compradores.
Pero esto significa también que el «rodaje» lo hacen también en estos vehículos. Aunque han sido probados a conciencia en laboratorio y vehículos de prueba, la percepción de los posibles compradores es que necesitan pasar un tiempo en el mercado para ser efectivos de verdad.
Otra cuestión es que la tecnología envejece con mucha rapidez, así que cuando llega a los coches de gama baja ya es vieja, aunque no obsoleta. Los sistemas Bluetooth, el reconocimiento de voz, los interfaces más prácticos de las pantallas multimedia y los sistemas de navegación ya son «viejos» cuando llegan a los coches de gama media y más aún cuando lo hacen a la gama baja.
En el estudio se clasificaron 32 marcas, entre las que destacaron Mercedes-Benz, Jaguar y Porsche como las marcas premium que mantenían valores de confiabilidad altos, pero por debajo de la media. Por encima de ellas quedaban BMW, Cadillac y Lexus. Esta última, por cierto, fue la que consiguió el honor de ser la elegida como más confiable de todas las que se encuentran en el mercado. Tesla, por ejemplo, no ha entrado en el estudio, pero de haberlo hecho, las quejas por su AutoPilot y el aviso de colisión frontal la habrían situado en penúltimo lugar.
Así, el estudio confirma que estas tecnologías ayudan a que los compradores pongan su vista sobre estos modelos, pero al mismo tiempo, hacen que los miren con mucha atención y elijan los más prácticos y eficientes. La tecnología se considera una aliada al conducir, pero tampoco vale todo.
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