El taxi autónomo llegará a Japón en 2026 de la mano de tres conocidas compañías de automoción

Estamos todavía muy lejos de la aplicación industrial de la conducción autónoma, pero ya hay varios proyectos para que se utilice en el transporte público. El taxi es el medio de transporte elegido para poder utilizar este sistema autónomo y llevar pasajeros hasta su destino de manera segura y sostenible. En Estados Unidos se están realizando pruebas en San Francisco y Las Vegas, entre otras ciudades y en Japón, se establecerá un servicio similar en 2026.

Una de las empresas que se encargarán de ello ha sido anunciada esta semana. Se trata de la unión de Honda, GM y Cruise, que se formalizará a mitad de 2024. La unión de estas tres empresas propiciará el uso de vehículos autónomos para moverse de manera autónoma por Tokio, aunque este servicio no comenzará hasta el año 2026.

Este servicio comenzará funcionando en el centro de la capital japonesa, operando con un vehículo autónomo, el Cruise Origin. Al principio, solo se desplegarán unas pocas unidades, aunque se espera que se alcance una flota de 500 unidades. También se espera que se expanda a otras ciudades y preste servicio a miles de personas en un plazo relatívamente corto.

Cruise lleva varios años colaborando con GM para perfeccionar el Cruise Origin y ha realizado varias modificaciones en su diseño y equipamiento para hacerlo cada vez más funcional. Esta dupla es la que está realizando pruebas en San Francisco, Phoenix y Austin. En estas ciudades estadounidenses, ya han sumado más de cinco millones de kilómetros de pruebas.

Se cumple un año del Robotaxi de Hyundai en Las Vegas: ni un accidente por su culpa

Ya hace un año que comenzaron a circular los Robotaxis por Las Vegas y los resultados son bastante buenos, según el operador, sin incidentes remarcables.

Este vehículo tiene capacidad para seis pasajeros, en dos bancadas de tres plazas cada una, enfrentadas entre sí.

Al parecer, en Tokio existe una seria demanda de taxistas, que no se consigue paliar. La llegada de estos vehículos ayudará a que el transporte público mejore su servicio y se consiga un número de vehículos destinados a este servicio suficiente y que no requiera de la presencia de un conductor humano.