Tarjetas de fidelidad en gasolineras, una inteligente alternativa de ahorro

Un coche podrá ser más o menos moderno, más o menos potente, más o menos tecnológico, más o menos avanzado. Sin embargo, siempre hay un factor común a todos y cada uno de ellos, sean de la naturaleza que sean… necesitan combustible para moverse y el 98% de ellos, combustible fósil del petróleo.

Sí, es cierto, a nadie le hace especial ilusión cuando se trata de pagar cuando utilizamos nuestro vehículo. Sin embargo, los carburantes son parte fundamental del ciclo de utilización de nuestro coche, cada vez más avanzados y eficientes, pero que aún necesitan de los mejores combustibles para transportarnos de un sitio a otro.

Hay tarjetas descuento que ofrecen ahorro de hasta 7 céntimos de euro por litro de combustibleUn vehículo tiene, además, numerosas necesidades. Las estaciones de servicio han sabido adaptarse a las exigencias de los clientes, y cada vez cuentan con un mayor número de servicios, más cómodos y más utiles para los usuarios. Lejos han quedado aquellos tiempos en los que, por ejemplo, en las estanterías de una estación de servicio encontrábamos poco más que una lata de aceite Castrol, pasando a convertirse en una extensión de nuestras necesidades.

Nuestros coches cada vez consumen menos y son más limpios en su utilización, pero si pretendemos ahorrar lo máximo posible en el gasto de carburante, las tarjetas de fidelización de las gasolineras son una excelente opción para sumar céntimos cada vez que llenemos el depósito de nuestro automóvil.

Cada empresa ofrece una serie de beneficios, que en mayor o menor medida están siempre enfocados a la reducción del precio por litro, una reducción que posteriormente se suele traducir en un descuento o en regalos que nos pueden resultar de lo más útiles en nuestro día a día.

Este tipo de tarjetas, por norma, ofrece descuentos más jugosos cuando repostamos combustibles premium, mejorando de forma indirecta la salud de nuestro motor a la vez que ahorramos una buena cantidad de dinero con cada reportaje.

Además, la utilización de estas tarjetas de fidelización no puede ser más sencilla. Basta con llegar a nuestra estación de servicio BP o de otra compañía, y al terminar el repostaje, presentar nuestra tarjeta, algo que cada vez es más cómodo. De hecho, podemos incluso llevar nuestra tarjeta en el smartphone, olvidándonos así de engordar nuestra cartera de forma innecesaria.

Una de las tarjetas de fidelización más populares es la Tarjeta Mi BP. La petrolera británica nos ofrece hasta 7 céntimos de ahorro por litro, de forma que cuanto más repostemos, más ahorraremos. Con estas soluciones, un conductor medio español, que recorre unos 15.000 kilómetros cada año, sería capaz de ahorrarse cifras cercanas al centenar de euros anuales, sabiendo además que recibirá la mejor de las atenciones en todo momento.