Toyota calienta motores para la presentación del Supra Concept en el Salón de Ginebra

Toyota quiere volver a lanzar al mercado «el deportivo más icónico de la historia» de la marca. Los primeros pasos para ello se dieron ya hace unos años, cuando el fabricante japonés llegó a un acuerdo con BMW para establecer una alianza estratégica en distintos campos, uno de los cuales contemplaba «el desarrollo conjunto de una nueva plataforma para coches deportivos con la que satisfacer las necesidades de ambas marcas para cubrir distintos segmentos del mercado de vehículos deportivos, sin necesidad de que los modelos resultante tengan por qué competir directamente entre ellos».

Y así ha sido. BMW se ha decantado por producir a partir de la citada plataforma el nuevo Z4 que la marca bávara presentó en el último Concurso de Elegancia de Peeble Beach a finales del pasado mes de noviembre, razón por la cual Toyota decidió posponer la presentación de su modelo deportivo y retrasó la presentación del Supra Concept prevista inicialmente para dar a conocer el modelo en el Salón de los Ángeles hasta el Salón de Ginebra que abrirá sus puertas a primeros del próximo mes de marzo.

Ambos coches se van a producir en Europa, en la planta que Magna Steyr tiene en Austria. Magna es un fabricante de pequeño tamaño pero de gran calidad, que trabaja asiduamente para grandes fabricantes de automóviles para los cuales produce modelos que no precisan de grandes volúmenes de producción. En Magna se están produciendo entre otros los Mercedes Clase G, el Aston Martin Rapide, el Mini Countryman y el Paceman,… BMW y Toyota tienen prevista la producción de 60.000 unidades cada uno de sus respectivos modelos, producción cuyos preparativos se iniciarán a finales de esta próxima primavera.

Antes, concretamente el día 6 de marzo, Toyota presentará en Ginebra el Supra Concept, el prototipo que prefigura la versión definitiva del Toyota Supra que se dará a conocer a finales del próximo otoño en el Salón de Tokio. El renacer del Supra es un acontecimiento largamente esperado por los aficionado de la marca y de los coches deportivos. El mítico modelo deportivo de Toyota se mantuvo 24 años en producción, desde 1978 hasta 2002.

Toyota quiere ahora hacer renacer al Supra y recuperar con él su ya casi olvidado prestigio como fabricante de vehículos deportivos. Así, en el Salón de Detroit de 2014 presentó un más que atractivo concept bajo la denominación FT-1 —modelo al que pertenecen las imágenes que ilustran esta noticia— que adelantaba las líneas del proyecto del Supra. En una entrevista concedida a la revista inglesa EVO, el entonces director de Gazoo Racing, la división encargada del desarrollo de los vehículos deportivos y más prestacionales de Toyota, Teysuya Tada, daba algunos detalles del futuro deportivo de la marca.

Los datos apuntaban a una construcción basada ante todo en lograr la máxima ligereza posible del conjunto, poniéndose como reto lograr ser más ligero que cualquiera de los rivales directos presentes en el mercado, a fin de conseguir gracias a ello las mejores prestaciones posibles gracias a una más que favorable relación peso potencia. Para ello, Toyota tendría distintos caminos posibles, aunque en ningún caso seguiría el de montar una mecánica cuatro cilindros turboalimentada, dadas las críticas que el propio Tada hacía en aquella entrevista respecto de modelos como los Porsche Boxster o Cayman.

Así las cosas, lo normal sería recurrir a una mecánica gasolina de gran cilindrada y potencia o apostar por un simple motor de gasolina en combinación con un sistema de gestión híbrida, dada la fuerte vinculación del fabricante japonés con esta tecnología. De hecho, se apunta a un posible desarrollo por parte de Toyota del V6 2.5 litros al que se dotaría de un sistema de turbocompresor de accionamiento eléctrico para incorporarla a este último tipo de mecánicas, lo que permitiría conseguir mayores rendimientos —entregaría unos 400 CV de par máximos— sin por ello perjudicar ni los consumos ni las emisiones en exceso.

Lo que sí que parece claro, al menos a la vista del teaser facilitado por Toyota sobre su nuevo deportivo, es que el coche dispondrá de hard top o techo rígido y un perfil ciertamente deportivo y bastante agresivo, en el que destacará el alerón de gran tamaño de su trasera, situado en posición bastante elevada lo que garantiza un elevado volumen de carga aerodinámica para literalmente pegarlo al suelo, síntoma indudable de las elevadas prestaciones que parece prometer, al menos a primera vista, el futuro Supra.