Spyker vive en una montaña rusa: de nuevo, al precipicio

Spyker Cars N.V., uno de los fabricantes más exóticos dentro de la automoción más vinculada a la aeronáutica aeroespacial, de nuevo vuelve a ser foco de atención pero, cual gráfico pandémico de oleadas, ahora su situación parece mostrarse, cuanto menos, dirigida, una vez más, hacia el abismo.

Según lo que publicamos a finales de este verano, la página web de Spyker volvía a estar activa, suponiendo, cual establecimiento a pie de calle, el levantamiento del cierre de la firma procedente de los Países Bajos. De esta forma en septiembre se invitaba a sintonizar con la marca de cara a conocer unos planes que tendría en 2021 el año de relanzamiento de la fabricación y comercialización de sus bellos automóviles.

De hecho, la hoja de ruta, avanzaba la apertura de una delegación ni más ni menos que en el Principado de Mónaco, con visos de llevar a cabo una contenida pero meditada expansión de sus distribuidores comerciales en otros países o emplazamientos donde Spyker pudiera ofrecer sus nuevos coches.

A tenor de lo publicado por el medio neerlandés RTL Nieuws, Spyker Cars se encuentra, de nuevo, en el limbo, al borde del precipicio, próximo a volver a diluirse con más pena que gloria, una vez más y van tres.

Los planes de y para Spyker vuelven, de nuevo, a diluirse

Por las informaciones que manejan desde el medio nativo también de la marca, el propio Victor Muller, el CEO de la firma y que también lo fuera de Saab, ha confirmado la declaración de bancarrota de las empresas que conforman Spyker Cars N.V., consorcio que aglutina las actividades de las firmas que habían quedado diferenciadas en las empresas bajo el nombre de Spyker Events y Spyker Services.

Así mismo, el propio Muller ha confirmado que, el dinero que iba a permitir revivir los planes comerciales de Spyker Cars N.V. procedentes de dos grupos de inversión rusos, nunca llegaron.

Esta situación llevó a los responsables de cada una de estas secciones, Willem Jan van Andel de Spyker Events y Dennis Steffens de Spyker Services, a declarar la bancarrota de cada una, situación que arrastró a la matriz a quedar en la misma situación.

En sus declaraciones al medio, neerlandés, Muller es optimista, anuncia que no cesará en sus empeños de volver a activar las fábricas de Spyker y que aún cuenta con alguna posibilidad de recibir inversiones, al margen de las rusas que quedaron en agua de borrajas.

Veremos, pues, si en los próximos meses, o año, volvemos a tener noticias de ellos… o no. En estos momentos, lo único que parece claro es que la página web de Spyker aparece de nuevo caída.