Un Skoda Superb con 560 CV: así es el lobo con piel de cordero por excelencia

La mayoría de vehículos muy potentes se ven acompañados por una estética deportiva y exaltada, la cual busca reflejar el rango de potencia que se esconde en las entrañas de dicho modelo. Sin embargo, en el mundo automovilístico hay una categoría no oficial que hace referencia a aquellos coches cuya estética no va acorde con las prestaciones, y la cual se conoce como lobos con piel de cordero. Hace tiempo os ofrecimos un ranking con los mejores exponentes de dicho «segmento», pero hoy os traemos lo que puede ser el mejor ejemplo de todos, un Skoda Superb con nada más y nada menos que 560 CV de potencia.

La berlina de origen checo siempre ha sido un referente en su segmento, donde es capaz de ofrecer una de las mejores relaciones calidad-precio. Esto también se ve arropado por una calidad de acabados a la altura de sus rivales y por una gama de motores potentes, suaves y listos para ofrecer un alto nivel de confort. Sin embargo, Michael, dueño de este espectacular Superb, ha decidido ir mucho más lejos y dar paso a una faceta de la berlina inexplorada hasta el momento.

De serie, este Skoda Superb incorporaba el ya conocido propulsor gasolina de cuatro cilindros y 2.0 litros de cubicaje. Gracias a la presencia de este motor, la berlina checa se encuentra en la tesitura de erogar 280 CV de potencia y 350 Nm de par. Sin embargo, el propietario de este Superb no se encontraba satisfecho, y es por esto que llevó a cabo una serie de modificaciones para sacar a relucir el potencial oculto de dicho corazón turboalimentado.

A nivel estético, son pocos los cambios que nos pueden llevar a deducir que este Skoda Superb esconde en su interior 560 CV, pero Michael decidió proporcionarle a su coche algunos detalles más deportivos. Por una parte, nos encontramos con unas nuevas llantas multiradio que desvelan, en cierta manera, el nuevo carácter de esta berlina vitaminada, y las cuales se ven acompañadas de unos neumáticos semi slicks. En lo que respecta a la zaga nos encontramos con un nuevo difusor, el cual no solo cuenta con un diseño más agresivo, sino que también se encarga de custodiar a la doble salida del escape personalizado que incorpora este Skoda Superb tan especial.

Pero es en el apartado mecánico donde la historia de este Superb se pone realmente interesante. Lo primero que confiesa Michael es que llevó a cabo un swap, el cual consistió en cambiar el motor original por el de un Audi S3. Una vez asentada la base sobre la que partir, Michael comenzó a instalar diferentes mejoras. Entre ellas se encuentra una Stage 3, la cual se ve acompañada de un motor forjado al igual que la caja de cambios DSG de siete velocidades, una tarea que llevó a cabo ARP para que pudiese aguantar más par sin problemas.

Con una aceleración de 0 a 100 km/h en tan solo 2,9 segundos, este Skoda Superb está dispuesto a no solo a asustar a diversos superdeportivos, sino a convertirse en el vehículo perfecto por excelencia. De esta forma, Michael ha conseguido obtener un coche lo suficientemente rápido como para divertirse y, al mismo tiempo, mantener intacto el confort y calidad de rodadura que caracterizan a la berlina de Skoda. Sin embargo, para obtener este conjunto también ha sido necesario mejorar diferentes componentes, como los frenos o la suspensión (Bilstein B14), con el objetivo de poder entregar los 560 CV sin ningún riesgo.