El Škoda Karoq será más deportivo con la versión Sportline que veremos en el Salón de París

Todavía sin cumplir un año en el mercado el Škoda Karoq va poco a poco aumenta su familia y su oferta, siguiendo la estela de su hermano mayor, el Kodiaq. Este último ya cuenta en su catálogo con la versión más campera, el Scout, y la versión más deportiva, el Sportline, mientras que el Karoq hace tan solo un par de días recibía entre su filas al Scout y, ahora, hace lo mismo anunciado su variante Sportline.

Con este movimiento Škoda se asegura una oferta más amplia en el competitivo mercado de los SUV, ofreciendo con el Karoq Sportline una versión más orientada a aquellos que buscan una estética exterior más deportiva, algo también presente en el interior, acompañado de un equipamiento más tecnológico. El Škoda Karoq Sportline, al igual que la versión Scout, será presentada al público el próximo cuatro de octubre durante la celebración del Paris Motor Show.

Aparte de su diseño, del que hablaremos unas líneas más abajo, la principal novedad la encontramos en el apartado mecánico. En el Škoda Karoq Sportline se ofrecerá de manera exclusiva el motor gasolina más potente, se trata de un motor de 2.000 CC TSI que entregará una potencia de 190 CV, ligado a la transmisión automática DSG de 7 velocidades y a la tracción permanente a las cuatro ruedas. Si nos resulta demasiado potente, podremos decantarnos por el motor 1.5 TSI de 150 CV  y caja de cambios manual de 6 velocidades, aunque opcionalmente podremos montar la caja de cambios DSG y la tracción permanente a las cuatro ruedas.

No serán los únicos motores que nos encontraremos, ya que aquellos que prefieran optar por una mecánica diésel también tendrán sus opciones. Al igual que sucede con los gasolina, en el Karoq Sportline también encontraremos la variante más potente a cargo de un 2.0 TDI que también ofrece 190 CV, por supuesto junto con la transmisión DSG y la tracción permanente a las cuatro ruedas. La opción más descafeinada corre a cargo del motor 2.0 TDI de 150 CV con caja de cambios manual, con opción a la transmisión DSG y la tracción a las cuatro ruedas.

Si nos vamos ahora a su estética, el Škoda Karoq gana enteros con la línea Sportline, con una imagen deportiva que le queda como un guante, en especial con el acabado rojo para su carrocería, el cual ayuda a resaltar en mayor medida el acabado negro imprimido en elementos como la parrilla delantera, las barras de techo, los marcos de las puertas y en las molduras laterales y delanteras. Los parachoques también son de nueva factura, y se incluyen unas llantas de diseño deportivo que serán de 18 pulgadas de serie en diseño Mytikas, con opción a montar las llantas Vega en 19 pulgadas y acabado pulido.

En el interior también se ha seguido con la misma línea otorgada al exterior, instalando por ejemplo los asientos deportivos con un nuevo tapizado que ofrecer un mayor confort, aumentado también por el soporte lumbar que incluyen. También se ha instalado el volante deportivo achatado en su parte inferior, tapizado en cuero microperforado y con molduras en plateado; molduras en negro para el salpicadero y paneles de las puertas, pedales en acero inoxidable y el paquete de iluminación interior LED.

Si queremos seguir añadiendo un toque más deportivo podremos hacerlo con el Virtual Cockpit, pero ya de manera opcional, que cuenta con varios modos de configuración de su vista. Además, como es lógico, contaremos con el equipamiento extra ya conocido del Karoq, así como las habituales soluciones Simple Clever de Škoda.