Škoda celebra el 60 cumpleaños de uno de sus modelos de competición más emblemáticos: el 1100 OHC

David Lopez    @espacionblanco    11 diciembre 2017     4 min.
Škoda celebra el 60 cumpleaños de uno de sus modelos de competición más emblemáticos: el 1100 OHC

Aunque su historia deportiva va ligada a los rallies, Škoda también creó un prototipo para carreras de velocidad: el 1100 OHC, que celebra su 60 aniversario

Cuando piensas en marcas asociadas a la competición, Škoda no es una de las primeras que se te vengan a la cabeza, pero como muchos bien sabréis la marcha checa tiene un amplio recorrido y experiencia en el mundo de los rallies, que es donde quizás hayan destacado más. De todas maneras, aunque era en los rallies donde se movían como pez en el agua, Škoda también quiso probar suerte en el mundo de las carreras de velocidad.

Esta idea comenzó a forjarse en el año 1956, cuando los diseñadores de Škoda se encontraban diseñando el 1100 OHC, el primer prototipo deportivo de la marca. El Škoda 1100 OHC se trataba de un modelo biplaza descapotable destinado para la competición, el cual llego a pisar el asfalto por primera vez en 1957, trayendo además numerosas innovaciones que en aquella época resultaron vanguardistas, convirtiéndose así en un hito en los 116 años de historia de Škoda.

Škoda celebra el 60 cumpleaños de uno de sus modelos de competición más emblemáticos: el 1100 OHC

El Škoda 1100 OHC se encontraba propulsado por un motor de cuatro cilindros en línea de 1.089 CC situado en la parte delantera, montando dos árboles de levas en el cabezal del cilindro. Este motor entregaba una potencia máxima que para la época era realmente espectacular, aunque a día de hoy casi te provoca risa, siendo esta de 92 CV a 7.700 rpm, mientras que la velocidad máxima del motor se fijó en 8.500 rpm/min; además Škoda usó un carburante de alto octanaje derivado de la aviación.

Pero la piel que cubría a este corazón también llamaba la atención por su diseño alargado, de hecho contaba con una distancia entre ejes de 2.200 milímetros, siendo la longitud total de 3.880 milímetros por una anchura de 1.430 milímetros; pero lo que quizás también resultaba sorprendente era su escasa altura respecto al suelo de solo 965 milímetros. Su carrocería se fabricó con plástico reforzado con fibra de vidrio (GRP), lo que se traducía en un ínfimo peso de 550 kilogramos para todo el conjunto,  que unido a su gran aerodinámica le permitían tener una gran aceleración, junto con una velocidad máxima se situaba entre 190 y 200 Km/H. Como curiosidad, decir que en el desarrollo inicial el 1100 OHC tenía faros retráctiles, pero se sustituyeron por fijos con carcasa de Plexiglas.

Škoda celebra el 60 cumpleaños de uno de sus modelos de competición más emblemáticos: el 1100 OHC

El Škoda 1100 OHC también contribuyó con otros elementos de diseño que en la época se consideraba tecnología de vanguardia, como la distribución casi perfecta de su peso, en la que contribuía de manera especial el chasis de tubo enrejado fabricado con tubos de poco espesor; también el embrague, la caja de cambios y la caja de transferencia se ubicaron en la parte trasera como un sola unidad de ensamblaje; mientras que la suspensión de barra de torsión también supuso un avance importante.

La primera vez que se puso en pista toda esta tecnología terminó con victoria para el Škoda 1100 OHC en el circuito municipal de Mladá Boleslav, lugar de la sede de Škoda, continuando con victorias en otros eventos locales y en otros países. Por desgracia, la situación política que se vivía en esa época no era propicia para el Škoda 1100 OHC, ya que solamente se les permitía participar en carreras realizadas en países socialistas, por lo que el mundo apenas pudo admirar a esta joya sobre ruedas durante aquellos años.

Škoda celebra el 60 cumpleaños de uno de sus modelos de competición más emblemáticos: el 1100 OHC

Tras el éxito cosechado por el 1100 OHC descapotable, Škoda se animó en 1959 a fabricarlo en su versión coupé, diferenciándose por utilizar una carrocería cerrada en aluminio que aumentaba el peso a los 618 Kg, aunque el rendimiento respecto a la versión descapotable no se veía sacrificado. Por desgracia, las dos unidades coupé sufrieron sendos graves accidentes en carreteras públicas dejándolos totalmente inutilizados, por lo que ahora los restauradores de Škoda se encuentra trabajando en su restauración partiendo del chasis y la transmisión de uno de ellos.

Por otro lado, de las dos unidades del 1100 OHC descapotable existentes, una de ellas es propiedad de Škoda UK y utilizada en eventos en el Reino Unido; mientras que la otra unidad se encuentra en el museo de Škoda para su exposición, aunque también es utilizada en eventos nacionales o internacionales de coches de época.

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