Salón de París 2014: Suzuki

Suzuki dio a conocer a finales de agosto los primeros detalles de la nueva generación del Vitara y hoy ha presentado el modelo en el Salón de París. Su fabricación comenzará a principios de 2015 en el centro húngaro Magyar Suzuki de Estrigonia y poco después se introducirá en los concesionarios europeos para posteriormente comercializarse en más regiones del mundo.

El diseño del nuevo Vitara apenas ha experimentado alteraciones desde el prototipo iV-4 que vimos en el Salón de Fráncfort de 2013; paragolpes, ópticas, parrilla delantera, retrovisores exteriores, llantas y el habitáculo son las más significativas. La carrocería mide 4.175 mm de largo, 1.775 mm de ancho y 1.610 mm de alto, por lo que es más compacto que el Grand Vitara. El S-Cross es 125 mm más largo, pero también 10 mm más estrecho y 35 mm más bajo.

La batalla pasa de 2.640 mm en el Grand Vitara a los 2.500 mm del nuevo Suzuki Vitara 2015, disminución que se produce igualmente en la altura libre, que se rebaja cinco milímetros hasta los 185 mm del modelo recién presentado. Sus ángulos de entrada y de salida son 18,2 grados y 28,2 grados, respectivamente.

El habitáculo muestra un nuevo panel de instrumentos con dos grandes relojes y una pantalla de mayor tamaño entre ellos, un volante con una superficie central más voluminosa y botones más grandes, nuevas salidas de aire circulares, una consola central más limpia dominada en los acabados más altos por una pantalla táctil de 7″ con la que se maneja el sistema multimedia y un túnel central con una moldura en forma de U que separa la palanca de cambios de la ruleta con la que se selecciona el modo de conducción.

El maletero del Vitara ofrece 375 litros de capacidad sin plegar los asientos traseros, es decir, 23 litros menos que el Grand Vitara. El S-Cross, con 430 litros, se convertirá ahora en la opción de la gama de Suzuki para aquellos clientes que necesiten un volumen de espacio mayor. No obstante, el espacio del Vitara puede ampliarse hasta 710 litros si se abate la fila trasera de asientos.

Esta generación del modelo hereda del SX4 S-Cross el techo panorámico compuesto de dos paneles de cristal que está disponible en opción. La longitud combinada de ambos paneles es de un metro y el hueco que dejan cuando se abre el techo mide 560 mm.

La decoración exterior del Vitara, y en menor medida la de su habitáculo, puede personalizarse con muchas más opciones que en el Grand Vitara. Suzuki ha añadido tres tonalidades para la carrocería (Azul Turquesa Perlado Metalizado, Naranja Atardecer Metalizado y Marfil Savana Metalizado) y permite cambiar el color de varios componentes, como la parrilla en el exterior o las molduras del panel de instrumentos y de la guantera en el interior.

Si el cliente desea acentuar más la personalidad de su Vitara, dispone de dos paquetes de accesorios con los que resaltarla: el «Rugged» propone un aspecto más aventurero, mientras que el «Urban» aplica un acabado cromado a diversas zonas de la carrocería e incorpora un spoiler trasero.

La oferta de motorizaciones del Vitara la forman un propulsor de gasolina y otro Diésel, denominado DDiS. Ambos tienen cuatro cilindros, 1,6 litros de cilindrada, 120 CV y se combinan tanto con el sistema de tracción delantera como el de tracción en las cuatro ruedas. El de gasolina se puede acoplar a una caja de cambios manual de cinco relaciones o a una automática de seis; el Diésel únicamente se asocia a la transmisión manual.

Otra característica que comparte el Vitara con el SX4 S-Cross es el sistema ALLGRIP. En el nuevo modelo, además de las cuatro configuraciones de conducción ya conocidas, esta tecnología se beneficia de una nueva función que permite incrementar el flujo de par que reciben las ruedas traseras si las delanteras patinan.

Las suspensiones delantera y trasera son McPherson y de barra de torsión, ambas con muelle helicoidal, igual que en el SX4 S-Cross. En el equipamiento de seguridad activa destaca el nuevo sistema de asistencia a la frenada (RBS) en tres fases: alerta visual y acústica al conductor si detecta peligro de colisión, incremento de la fuerza de frenado y frenado automático si el conductor no reacciona.

No faltan tampoco siete airbags, ESP, control de velocidad adaptativo, limitador de velocidad, sistema de control de la presión de los neumáticos y la tecnología TECT de la carrocería que aumenta su capacidad de absorber la fuerza de los impactos y mitigar los daños que pueda sufrir el vehículo.

Aunque todavía no se ha anunciado cuándo llegará finalmente a Europa, el Celerio está presente de nuevo estos días en París tras probar suerte en el Salón de Ginebra de este año. Dado que el Splash ha perdido su gemelo de GM y el Alto actual va a cumplir cinco años, puede que este utilitario se convierta en el nuevo representante de Suzuki en el segmento A.

Fotos | Suzuki y Rubén R.