Salón del Automóvil de Vigo: Lexus LS600h

Muchos pasarían de largo frente a uno sin percatarse por ser una marca todavía poco sonora, con un diseño discreto y con escasa publicidad… pero para los que realmente saben lo que es un LS600h, la única excusa para no advertirlo es el prácticamente nulo ruido que desprende a baja velocidad.

Es un híbrido, es una gran berlina, es superlujo y es alta tecnología. El Lexus LS600h puede ser muchas cosas y también caro, más de 110.000 euros, una cifra que le hacía merecer el título de uno de los vehículos más caros y exclusivos de la muestra.

Sus cinco metros de largo son desplazados por dos motores, uno eléctrico y otro V8 a gasolina, que le dan la potencia de 445 caballos. Todo eso pasa del interior del capot al suelo mediante un sistema de tracción total permanente, haciendo sus que sus dimensiones -aparentemente torpes- se conviertan en ágiles.

La protagonista era la versión President, la más lujosa aunque no en su versión larga. Dentro de ella la idea habitual de espacio en coches convencionales se diluye; el simple hecho de acceder a la parte trasera es buena muestra de ello. Para llegar desde la puerta a la parte central (desde donde tomar la fotografía superior) la distancia es bastante a recorrer. Sin embargo, las dimensiones del coche se corresponden y no hay mucho que agregar respecto a esto.

Llama la atención la insonorización y el nivel de acabado; parece que cada esquina y cada costura haya sido revisada a microscopio para no descuidar ni un sólo hilo suelto o ápice que solventar. Todo rebosa perfección, y el cuero blanco combinado con unas inserciones grises -que parecían marmol, vete tu a saber- transmite una sensación de pureza.

Si a esto le unimos que a una circulación calmada el motor eléctrico no ocasionará apenas ruidos… nos encontramos con un sedán en el que viajar despiertos sobre los brazos de morfeo.

Quizás me haya desmedido un poco en estas calificaciones, pero no se alejan de la realidad, creedme. Esta berlina japonesa puede que no destaque en diseño o en otras muchas cualidades, pero el comprador sabrá en qué se ha gastado los más de 110.000 euros que cuesta cuando vea la calidad de sus acabados y lo apacible que puede resultar estar en el interior.

Otros detalles de equipamiento y funcionalidades creo que pueden ser demasiados extensos en un coche así, por lo que os recomiendo que os paséis por su web oficial para conocerlo más a fondo.

Fotos | Eduardo Mariz
Más información | Mundo Lexus
Agradecimientos al concesionario Grupo Breogan.