Renault Austral: así funciona el sistema 4Control Advanded de cuatro ruedas directrices

Renault presentó su primer sistema de dirección a las cuatro ruedas allá por 2007. Y todavía recuerdo la primera vez que pude probarlo. Te hablo, año arriba o año abajo, de 2009; yo trabajaba en otro medio, por aquel entonces en una de las revistas semanales especializadas en motor más populares del momento.

No era el primer coche con dirección a las cuatro ruedas que conducía, pues ya había probado con anterioridad el Honda Prelude. Pero para comprobar las ventajas de este sistema, preparamos una comparativa especial entre un Renault Laguna Coupé equipado con la dirección 4Control y nada menos que un Porsche. Los resultados en pruebas específicas en las que la dirección a las cuatro ruedas saca a relucir sus ventajas, como por ejemplo un slalom a distintas velocidades, fueron sorprendentes.

Me viene esto a la memoria ahora que Renault presenta la tercera generación ya de su sistema de cuatro ruedas directrices, denominado 4Control Advanced, y que se estrena en el nuevo Renault Austral. Parece mentira que hoy en día, un sistema aparentemente tan sencillo de implementar, sobre todo ahora con las facilidad que aporta la electrificación, se reserve casi en exclusiva para vehículos SUV o grandes berlinas de alta gama.

Las ventajas de la dirección a las cuatro ruedas

Las ventajas que aporta un sistema de dirección a las cuatro ruedas como la tercera generación del 4Control de Renault siguen siendo básicamente las mismas que las de su primera generación:

• Reducción del radio de giro, lo que facilita enormemente las maniobras
• Más agilidad en carreteras de curvas
• Mayor estabilidad al cambiar de carril circulando por autopista

En el caso del sistema 4CONTROL Advanced del Austral, las ruedas traseras giran hasta un grado en la misma dirección que las delanteras cuando se circula a velocidades de autopista, o al tomar curvas a más de 50 km/h. En maniobras, las ruedas traseras giran hasta cinco grados en dirección contraria a las delanteras, lo que supone 1,5 grados más que en la generación anterior. Esto permite que el radio de giro entre aceras del Austral sea de apenas 10,1 metros (frente a los 11,5 de un Austral sin este sistema), comparable al de un Clio.

El sistema funciona mediante un motor eléctrico que se encarga de mover una cremallera que acciona el giro de las ruedas traseras. Con una menor desmultiplicación en el eje delantero que las versiones con dirección convencional, el Austral con este sistema necesita menos grados de giro de volante para lograr el mismo giro de las ruedas, lo que hace que la respuesta sea todavía más directa.

Además, hay que tener en cuenta que las versiones del Renault Austral con sistema 4CONTROL Advanced utilizan una suspensión trasera multibrazo en vez de un sistema de brazos tirados con eje torsional, lo que resulta más eficaz. El modo en el que se acciona la dirección de las ruedas en el eje trasero depende de multitud de parámetros, incluyendo el programa seleccionado (Eco, Comfort o Sport) en el sistema Multi-Sense de modos de conducción.