La quinta generación del Renault Clio llega con versión híbrida y motorizaciones diésel y gasolina que van desde los 75 hasta los 130 CV.
Clio Renault Compactos Pruebas
Probamos el nuevo Renault Clio 1.0 TCe: ¿son suficientes 100 CV y 3 cilindros?
Nos ponemos al volante del nuevo Renault Clio en su versión 1.0 TCe de 3 cilindros de gasolina con 100 CV; te contamos por qué es la más interesante de la gama
Ya hemos probado el nuevo Renault Clio en la presentación internacional a la prensa que ha tenido lugar en Portugal. Un coche que se presentó al público en el Salón del Automóvil de Ginebra, y que luego también hemos visto en directo en el Salón de Barcelona.
Ahora nos hemos puesto a sus mandos. Y en la breve toma de contacto, a la espera de una futura prueba a fondo, nos hemos centrado en hacer kilómetros y convivir con la que, a priori, nos parece la versión más interesante de la gama: el Renault Clio con el nuevo motor 1.0 TCe de 3 cilindros y 100 CV de potencia.
Un repaso a lo que aporta el nuevo Renault Clio
Antes de empezar, repasemos lo que nos trae la que supone ya la quinta generación del Renault Clio. Todo un superventas, del que ya se han comercializado nada menos que 15 millones de unidades de las cuatro generaciones anteriores, de ellas 1 millón en España.
Y sí, hablamos de quinta generación, porque no se trata de un simple lavado de cara, aunque su diseño pueda resultar demasiado familiar. Y es que en Renault no lo han podido evitar, y el nuevo Clio tiene un parecido tremendo…. ¡con su hermano mayor, el Mégane! Sobre todo, visto de frente.
Pero vayamos al lado técnico… y al práctico. Porque para hacerlo de la estética ya están los futuros compradores, que al menos en España han sido claros: el Clio se destaca de la competencia precisamente por tener en el diseño una de sus primeras razones de compra, por encima del precio. Para abrir boca, aquí puedes verlo en acción en este vídeo
Y lo más importante de todo es que el Renault Clio 2019 estrena una plataforma modular completamente nueva. La denominan internamente CMF-B, es más rígida, más ligera, permite un mejor aprovechamiento del espacio… y está preparada para la electrificación.
Este es otro punto clave, pues para 2020, Renault pondrá en el mercado una versión híbrida, el Renault Clio E-TECH. Combinará un nuevo motor 1.6 de gasolina con dos motores eléctricos, uno principal capaz de mover las ruedas, y otro secundario que hace las veces de motor de arranque, se encarga de accionar un también novedoso cambio de marchas multimodo, y puede recuperar energía. Con una batería de 1,2 kWh, Renault asegura que puede recorrer hasta 5 km en modo EV, lo que permitirá ahorros de combustible de hasta un 40% en ciclo urbano.
Exteriormente, más allá del nuevo diseño, llama la atención que el Renault Clio no ha crecido sustancialmente, salvo en anchura, donde gana 7 cm. De hecho, recorta la longitud ligeramente para quedarse en 4,05 metros, y es 1 cm más bajo. Una apuesta interesante es la de los faros completos mediante tecnología LED, con un alcance muy superior a las de los halógenos convencionales. Veremos si para España son de serie en toda la gama.
Compacto por fuera, grande por dentro
¿Y por dentro? Pues no, no te asustes, que esa contención en tamaño exterior no ha supuesto perder ni un centímetro en habitabilidad. Más bien al contrario. La nueva plataforma, y el diseño del salpicadero y de los asientos, entre otras cosas, permite que el Clio siga siendo un coche con un interior muy bien aprovechado en relación a su tamaño exterior.
También merece mención especial el maletero. Cubica 391 litros, unos 60 más que el Clio saliente si utilizamos para comparar el mismo criterio de medición. Es de los mejores de su categoría, aunque le supera por muy poco el nuevo Peugeot 208. A destacar que cuenta con formas muy regulares y con un piso desmontable muy sólido y de fácil manejo que permite configurar un doble fondo y dejar la superficie de carga a ras con el borde, o situarlo en la parte más baja. Y es que el umbral de carga ahora es claramente más elevado, algo que se debe al diseño elegido por Renault para la zaga. El paragolpes llega muy arriba, para que en caso de alcance posterior haya menos posibilidades de que el portón sufra daños. En según qué mercados, esto es una ventaja a la hora de contratar una póliza de seguro.
Sobre el interior no nos vamos a extender mucho. Aquí podéis ver al detalle cómo es por dentro el interior del nuevo Renault Clio. Pero sí conviene aportar, una vez hemos podido conducirlo, que la sensación de calidad y el tacto que transmiten los materiales es muy bueno, con predominio de plásticos blandos y acolchados sobre materiales duros al tacto. También nos ha gustado mucho el nuevo diseño de los asientos, con banquetas más grandes y cómodas, y buena sujeción. A destacar que a pesar de contar con una pantalla multimedia que puede ser de hasta 9,3 pulgadas (de 7 en las versiones básicas), en Renault han decidido no confiar todo al manejo táctil, con una hilera de botones de fácil manejo para las funciones principales, y con todos los mandos de la climatización agrupados en la parte inferior de la consola central.
Sí conviene mencionar aquí el enorme avance en conectividad, con el sistema multimedia Renault EASY LINK. Tanto con la pantalla de 7 como con la de 9,3 pulgadas es compatible con Android Auto y Apple CarPlay. Y el módulo de conectividad instalado en el vehículo permite funciones como la actualización automática de los mapas del navegador, o servicios como los ofrecidos por TomTom (navegación) y Coyote (alerta de radares).
Otra novedad que hace subir de nivel al Clio, procedente de sus hermanos de gama, es el sistema Multi-Sense. Nos permite elegir entre tres programas, ECO, Sport y MySense, que modifican distintos parámetros para personalizar la experiencia de conducción. Entre ellos, la iluminación ambiental, el tacto de la dirección, la respuesta de motor… o la presentación en la instrumentación digital. De momento se ofrecerá como alternativa a la instrumentación analógica de las versiones base la variante “sencilla”, con 7 pulgadas. Más adelante llegará una de 10 pulgadas al más puro estilo del “digital cockpit” de Volkswagen, ya con posibilidad incluso de integrar la navegación a pantalla completa. Puedes ver un anticipo en este vídeo.
Renault Clio 1.0 TCe: un motor muy “resultón”
Renault ofrecerá en España el nuevo Clio con tres motores de gasolina y dos diésel. La gama comienza con el SCe atmosférico de 3 cilindros, que rinde 75 CV y 95 Nm de par. Un motor destinado principalmente a flotas, que se asociará a los dos acabados inferiores.
A este le seguirán el nuevo 1.0 TCe, con 100 CV de potencia y 160 Nm de par, acoplado a una caja de cambios manual de 5 velocidades, aunque más adelante se ofrecerá también un cambio automático X-TRONIC. La versión más potente en gasolina es ya un 4 cilindros, el 1.3 TCe de 130 CV que se utiliza en los Renault Captur y Mégane, así como en el Scénic y en el Kadjar. En el Clio va asociado a un cambio EDC de 7 marchas con doble embrague.
En Renault no han dejado a un lado los diésel, y se seguirá ofreciendo el 1.5 Blue dCi, en versiones de 85 y 115 CV, pensando principalmente en quienes utilizan el coche para recorrer muchos kilómetros, que es cuando el diésel sigue teniendo sentido.
De los cinco motores de la gama, el tricilíndrico de 1 litro y 100 CV tiene todas las papeletas para convertirse en el más vendido. Al menos a nosotros nos parece el más recomendable, por distintos motivos.
Para empezar, este motor ofrece un nivel de dinamismo y de prestaciones superior al que nos mostró el Clio TCe al que sustituye. Aquí tienes la prueba del Clio TCe de 90 CV. Y sin consumir más combustible. Más bien al contrario, pues en uso real, al contar con más empuje, se puede conducir más tiempo en marchas largas. Este Clio 1.0 TCe anuncia una punta de 187 km/h, con una aceleración de 0 a 100 km/h de 11,8 segundos. Es, por lo tanto, un motor con un nivel de dinamismo más que suficiente, que no te hará echar en falta más potencia salvo que busques un motor que encaje en tacto y prestaciones con la deportividad que transmite el nuevo acabado R.S. Line. Entonces sí debes dirigir tus miradas hacia el 1.3 de 130 CV. Aunque si te conformas con el 1.0 y no quieres renunciar a una imagen deportiva, has de saber que también el acabado R.S. Line se ofrecerá con el motor pequeño.
El consumo medio homologado es de 4,4 l/100 km, en ciclo NEDC. Nos sirve de comparación con los 5,2 l/100 km que homologa el 4 cilindros de 130 CV, que también hemos conducido durante la toma de contacto del nuevo Clio. En uso real, la diferencia de consumo entre uno y otro se puede cifrar en torno a 1,5 l/100 km, de ahí para arriba, por lo que aquí tienes uno de los primeros argumentos de este pequeño tricilíndrico: su eficiencia.
El otro es el agrado de conducción que proporciona. Empuja bien desde bajas vueltas, sin que se note que conduces un motor de tres cilindros. Y cumple tanto a la hora de moverse por ciudad con un consumo contenido, como para afrontar viajes ya de cierto kilometraje incluso con el coche cargado. Para eso está la palanca de cambios, ahora con mejor tacto. Si se necesita la potencia que el 1.0 es capaz de proporcionar, es cuestión de utilizar su capacidad para girar alto de vueltas.
Más motivos para elegir el 1.0: el precio. Ya hemos dicho que anda mucho y gasta poco, por lo que si se mantiene la diferencia en precios que se ha anunciado en la gama para Francia, será difícil amortizar los 1.500 euros más que cuesta el dCi de 85 CV, que tiene unas prestaciones claramente inferiores. Y mucho menos los 2.800 euros que existen con el dCi de 115 CV, que se coloca en prestaciones entre el 1.0 y el 1.3 de gasolina, eso sí, con un consumo imbatible.
Otro motivo para elegir el 1.0 si no vas a recorrer muchos kilómetros al año tiene que ver con el mantenimiento y las averías. Los diésel no son muy amigos de los recorridos urbanos, necesitan salir a carretera. Y más si, como es el caso de los nuevos Blue dCi, llevan filtros de partículas y, ahora, también necesitan aditivo Adblue. Además, el 1.0 de gasolina tiene distribución por cadena, sin mantenimiento, frente a la correa de los dCi, que sí necesita sustitución.
Por finalizar esta primera toma de contacto, destacar la sensación de aplomo y solidez que ofrece el nuevo Clio con el paso de los kilómetros. Realmente la nueva plataforma ha mejorado mucho la precisión y el equilibrio entre agilidad y confort. Y ahora, con la posibilidad de disfrutar de nuevas ayudas a la conducción que hasta el momento no estaban disponibles en el Clio, como la cámara 360 grados y la frenada activa de emergencia con detección de peatones y ciclistas (funciona con un radar y una cámara de vídeo).
Más adelante, ya en 2020, el nuevo Clio también contará con un sistema denominado “Highway & Traffic Jam Companion”, que también pudimos ensayar en la toma de contacto. Este asistente de conducción en autopista y con tráfico denso supone introducir en el Clio la conducción pilotada de nivel 2. Se ofrecerá únicamente en combinación con el Clio TCe de 130 CV y cambio automático. Para explicar cómo funciona, nada mejor que un vídeo:
Deja un comentario