Prueba Peugeot Metrópolis 400i SW, mejor con tres ruedas

Peugeot lo borda con esta Metrópolis, por su estética robusta de talla media, por su comodidad de uso y capacidad de carga, en particular en esta elegante y práctica versión SW que responde perfectamente a las necesidades de un usuario que puede desplazarse con rapidez por la ciudad y aparcar la moto para dejar el casco en la maleta y seguir hasta destino con una mochila o maletín que tienen su espacio en la maxiscooter.

En particular nos referimos a la SW por su doble cofre trasero, que le da un aspecto imponente y que tiene la doble función de ser un magnífico respaldo para el pasajero y ofrecer 54 litros de capacidad que están diseñados para albergar dos cascos integrales. Además el espacio del cofre trasero está comunicado con el baúl que hay bajo el asiento, que aporta otros 22 litros, todo ello bien acabado y con iluminación.

Hay varios scooters que pueden conducirse con carnet B (de coche), pero la mayoría son de 125 cc y en distancias medias, sencillamente alrededor de la ciudad, se quedan cortas o muy cortas mientras que la Peugeot Metrópolis 400i es perfecta justamente por eso, porque tiene potencia de sobra para seguir adelante con seguridad, confort y la velocidad suficiente para controlar el tráfico.

Un Scooter Premium por tecnología y confort de marcha

Las hay más pequeñas y se quedan cortas y las hay mucho más grandes y resultan torpes en ciudad, pero la Metrópolis tiene el tamaño perfecto para desenvolverse en el tráfico con sus 2,15 metros de largo y 77,5 cm de ancho. Es un scooter equilibrado y bien dimensionado y entre otras cosas su comodidad radica tanto en la altura al suelo, que es de 78 cm, es decir, más bien baja, como la distancia entre ambas ruedas, que es de 1,5 metros, lo que aporta aplomo y estabilidad. Además este es sin duda un producto Premium por elementos de confort que lo distinguen del resto de scooter de su categoría, no solo por la calidad de acabados, también por incluir gadgets tan atractivos como la llave remota que activa la moto solo por proximidad, también un cuadro de mandos digital fácil de consultar sin olvidar la conectividad gracias a la App i-Connect e incluso luces de tipo led que aportan una buena iluminación.

Su tecnología recibe mucho del automovilístico y eso se nota en cosas como el sistema de encendido automático de los warnings en caso de frenada de emergencia, la mencionada conectividad integrada y también por el parabrisas y respaldo del piloto ajustables que son solo algunos detalles que marcan la diferencia.

Las prestaciones adecuadas para la ciudad y alrededores

El motor Peugeot PowerMotion de 400 cc cumple con la normativa de emisiones Euro 5 y desarrolla 35,6 cv con un par de 38,1 Nm. Un propulsor sencillo que destaca por su baja rumorosidad y consumo con un resultado más que convincente incluso para moverse en carretera en recorridos medios para lo que desarrolla una velocidad máxima de 135 km/h que alcanza con facilidad.

Haciendo un uso razonable, la Metrópolis puede viajar con comodidad a medio régimen por encima de los 100 km/h, lo que permite ir a la velocidad del tráfico y no ser un peligro. Además, en su conjunto de lo que más y mejor se puede hablar es del concepto de comodidad, y no solo por tratarse de un tres ruedas estable capaz de mantenerse de pie gracias al sistema anti-tilting, que bloquea las ruedas para no tener nunca que poner el pie en el suelo, es cómodo también porque tiene un consumo ajustado con poco más de 3,9 litros para cada 100 kilómetros, y gracias a esto y a su depósito de trece litros… cabe algo más, es fácil superar los 300 kilómetros de autonomía si tratamos bien el acelerador.

Bloqueo de estabilidad para no bajar los pies al asfalto

Las dos ruedas del tren delantero aportan una estabilidad sobresaliente, en especial para todos los que no se consideran grandes expertos o moteros pero que no por ello van a dejar de disfrutar de un modo de movilidad excepcional por su agilidad como este Metrópolis. El bloqueo de estabilidad en parado por medio de un sencillo selector en el puño derecho, ubicado del mismo modo que el intermitente en el puño izquierdo, es decir, accesible y fácil de usar sin tener que buscarlo o mirar, es uno de los argumentos de mayor peso en el Metrópolis 400i SW.

El sistema de bloqueo de estabilidad da mucho juego porque es fácil de manejar y una vez que el conductor se acostumbre puede actuar sobre el pulsador tanto para comenzar a circular como en el momento de tenerse por ejemplo al llegar a un semáforo, de forma que la moto queda vertical sobre las tres ruedas. Del mismo modo, al reiniciar la marcha se desconecta de forma automática. Siempre nos confirma la operación por medio de pitidos y testigos luminosos y otro de los complementos perfectos para esta scooter es que no requiere utilizar el caballete para aparcarla, con el bloqueo de estabilidad se queda de pie y con el freno de mano se queda bloqueada. Así, nos ahorramos subirla al caballete, que no es muy incómodo, está muy retrasado y es fácil de usar, pero el peso está ahí…

Suavidad y tecnología al servicio del conductor

Peugeot ofrece mayor seguridad y estabilidad y lo consigue en especial con un tren delantero que copia fiel el asfalto, no es amigo de los baches, como le ocurre al resto de las motos y exige cierta dedicación o insistencia en su conducción; digamos que no quiere inclinarse o parece reticente a perder la verticalidad y hay que inclinarla para girar bien. En realidad y sin necesidad de ser un gran experto al manillar, se tardan pocos segundos en dominar la técnica, que se siente perfecta si tiramos de cadera y la acompañamos con suavidad.

Por su parte, el tren trasero es tan noble como el delantero. Dispone de doble conjunto muelle y amortiguador con regulación de carga que lo hace especialmente útil si llevamos pasajero y hemos cargado los baúles de nuestra SW. El funcionamiento es suave y progresivo, y además, la electrónica nos garantiza con una buena gestión del motor y con el control de tracción nos permite casi olvidarnos de todo, solo gas al puño en su correcta dosis, un buen estado para las ruedas siempre y la inevitable prudencia en marcha.

Peugeot Metrópolis 400i SW, el buque insignia de la marca

La conducción es sencilla, cómoda y especialmente segura, tanto por el sistema automático de estabilidad ya mencionado, como por tener una frenada contundente para detener la moto con facilidad. Hablamos de un scooter que pesa 280 kilos, y bastante más cargado con conductor, acompañante y con las maletas, de forma que hablamos de parar fácilmente un peso de más de 350 kilos que gracias al completo sistema de frenos dual que activa de igual forma, desde el manillar o desde el pedal de freno un sensible sistema con ABS y reparto automático entre ambas ruedas.

El Peugeot Metrópolis 400i SW es el buque insignia de la marca y lo tiene todo y nadie dijo que tenerlo todo fuera barato, hay calidad, tecnología y una enorme ventaja por aquello de poder ser conducida con el carnet B, por eso el precio es de 9.690 euros, eso sí, con un seguro por un año y cinco años de garantía, lo que dice mucho de Peugeot Motorcycles.