Prueba Mazda 3 Skyactiv-G 122 CV, un concept ECO

Mazda empezó el año renovando por completo uno de sus buques insignia, hablamos del nuevo Mazda 3 que llega al mercado totalmente actualizado y con importantes mejoras que sin lugar a dudas lo convierten en un compacto de referencia en el segmento.

Hemos podido probar el nuevo Mazda 3 con el motor gasolina 2.0 Skyactiv-G con 122 CV con tecnología micro-híbrida que le brinda la etiqueta ECO. No tiene turbo, ni su cilindrada se ha reducido a lo mínimo, pero tanto por tacto como por prestaciones esta combinación del Mazda 3 convence y mucho, si buscas un compacto premium, quédate con nosotros y te contaremos con todo detalle las sensaciones de este japonés.

Diseño: del concept a la calle con un interior sencillamente premium

Esta nueva generación del Mazda 3 va un paso más allá con el conocido diseño «kodo» y la gran mayoría de las líneas que definían al concept se han reflejado en el modelo de producción. Destacando poderosamente el frontal y la zaga.

En el frontal la deportividad está presente gracias a la enorme parrilla que ocupa todo el protagonismo, flanqueada por los faros con la seña de identidad de la marca y tecnología LED para todas las funciones de iluminación de serie.

Otro elemento llamativo es el enorme pilar C o la ausencia de líneas laterales, creando un diseño limpio y elegante que se realza con los diferentes reflejos de la luz. De nuevo las líneas del concept se ven en la zaga donde destacan los faros o las dos salidas de escape que aportan un toque deportivo.

Cuando pasamos al interior los cambios se notan aún más, puesto que la consola central se ha rediseñado por completo y ha aumentado la calidad, con plásticos blandos y materiales que no tienen nada que envidiar al interior de cualquier compacto premium.

Algo que se nota a primera vista, -y que es de agradecer- es la elegancia de lo sencillo, me explico, el diseño es simple pero funcional, con todo a mano pero con armonía (hasta la pantalla se encuentra integrada en las líneas del salpicadero), apenas están los mandos del clima y para controlar el sistema multimedia podemos usar los mandos ubicados en el tren central.

La instrumentación cuenta con pantalla digital pero las agujas son analógicas (de nuevo algo que se agradece ahora que es tendencia poner una pantalla como velocímetro, seré nostálgico pero prefiero parte analógica). Desde ahí podemos ver todo tipo de información del ordenador de abordo.

La postura de conducción es cómoda, desde Mazda han trabajado la ergonomía de los asientos para mejorar la postura de conducción y que sea más cómoda y natural. Como detalle curioso, el reposabrazos de la puerta está a la misma altura que el del tren central para una conducción más confortable. Los asientos recogen de forma correcta el cuerpo y en nuestra unidad disponían de ajuste eléctrico y calefacción.

Las plazas traseras, no destacan por exceso de amplitud ni su acceso es de los más cómodos del segmento, pero cumplen de forma correcta en cuanto a espacio para pies y cabeza. Como detalle a reseñar, el diseño exterior condiciona la forma de la ventanilla trasera quitando luminosidad atrás. El maletero tiene un tamaño correcto, con una capacidad de 358 litros.

En resumen, el nuevo Mazda 3 destaca por calidad y diseño interior. Por poner un pero, quizás una luz ambiente interior no le vendría mal.

Motor: extraordinariamente atmosférico y con etiqueta ECO

Que a día de hoy sigan existiendo motores atmosféricos es algo que destacar, porque con las restrictivas normativas anticontaminación, lo normal son motores con turbo o con otro tipo de sistemas que ayuden a que emita menos. Pues bien, Mazda ha conseguido cumplir con la existente normativa de emisiones, pero sin complicar la mecánica de sus coches y además con un motor atmosférico bajo el capó.

Este bloque de dos litros destaca por suavidad, aportando todos sus caballos de forma lineal, pero hay que subirlo más de vueltas para sacarle todo el partido y sus 213 Nm de par motor están disponibles a 4.000 r.p.m. Esto es algo inusual en la época donde la mayoría de los motores son turbo, pero para los que nos gusta disfrutar de la conducción, es un punto a favor de este japonés. Podemos circular calmados a poco más de 1.500 r.p.m. o subir hasta más de 4.500 vueltas si queremos un comportamiento más agresivo, todo ello con la suavidad como premisa.

Este Mazda 3 lleva el distintivo ECO gracias a la micro-hibridación, puesto que dispone de un sistema eléctrico (M Hybrid) que gracias a un alternador y a una pequeña batería, apoya al motor de combustión en los momentos de demanda de potencia, reduciendo el consumo e incluso aportando un plus en momentos de demanda de potencia. Es uno de los pocos compactos del mercado con esta tecnología micro-híbrida.

El complemento ideal del motor es su caja de cambios manual de seis relaciones, aunque las cajas automáticas tienen un buen funcionamiento, mi recomendación es optar siempre por una caja manual porque su tacto es sencillamente sobresaliente. Gracias a «jugar» con la caja, sacaremos todo el brillo al motor, dando la sensación que tenemos más caballos disponibles bajo el capó.

Comportamiento: dinámico, suave y confortable

En esta nueva generación del Mazda 3 se nota el trabajo que ha hecho la marca en mejorar el chasis y su sensación de dinamismo (ya la anterior generación destacaba en este campo) pero es que el nuevo Mazda 3 se supera a sí mismo. La sensación al volante es de neutralidad, no percibimos inercias y el coche entra en las curvas con una estabilidad sobresaliente, siendo predecible y preciso.

Las sensaciones al volante, en zonas de curvas, son naturales, propias de un compacto de corte más deportivo. Mientras que en carretera es un coche suave, con una buena insonorización interior (en este aspecto mejora también con respecto a la anterior generación).

En general esto nos permite una conducción tranquila y sosegada, con un nivel de confort elevado o una conducción más dinámica donde sorprende su motor de sólo 122 CV, porque realmente puede ser muy divertido en un puerto de montaña o carretera con curvas.

Consumo

El consumo en carretera en nuestro recorrido habitual se situó entre los 5,7 litros a los 100 km (con una conducción más cuidadosa) hasta los 6,4 litros a los 100 km (siendo más despreocupados). En autovía la cifra de consumo rondó los 6 litros a los 100 km, y en ciudad en nuestro recorrido habitual por Vigo se situó en los 7,4 litros a los 100 km.

Equipamiento

Lo que más destaca del equipamiento es el enorme arsenal de asistentes de conducción, con sistemas como: aviso del ángulo muerto del retrovisor, lector de señales de tráfico, freno automático en caso de colisión frontal y trasera, control de cambio involuntario de carril, luces largas automáticas, entre otros.

Desde un sólo botón podemos accionar o desconectar todo este arsenal de sistemas de seguridad, con algunas peculiaridades que otros modelos no tienen, como el aviso acústico del ángulo muerto del retrovisor (algunos modelos del segmento sólo lleva una luz indicadora pero no un aviso acústico) o freno automático en caso de colisión trasera (que puede llegar a detener el coche por completo si detecta tráfico trasero y posibilidad de colisión) siendo muy útil en ciudad al salir de un aparcamiento o maniobrar con poca visibilidad.

Destaca el completo equipamiento desde la versión básica «Origin» con múltiples asistentes a la conducción de serie, airbag de rodilla para conductor, sistema multimedia (Mazda Connect) con pantalla de 8,8 pulgadas y 8 altavoces, climatizador bizona, luces LED, llantas de aleación de 16 pulgadas, entre otros.

Un elemento del equipamiento de serie en este nivel de acabado y que han renovado por completo es el sistema de sonido Bose con 12 altavoces, suena realmente bien, pero según mi percepción personal ha perdido algo de potencia con respecto a la anterior generación, donde sencillamente era sublime. Por último, el sistema de entretenimiento destaca por ser minimalista pero con todo tipo de funcionalidades, siendo fácil de usar y muy intuitivo.

Precio del Mazda 3 y Opinión Personal

El precio de partida para el Mazda 3 es de 23.765 euros, para la versión de cinco puertas y sin tener en cuenta descuentos u otras campañas comerciales que puedan existir puntualmente. Por este precio de partida, tenemos un Mazda 3 con motor gasolina y tecnología M Hybrid que le otorga la etiqueta ECO, todo ello con un completo equipamiento de serie que no se olvida de un arsenal de asistentes de conducción o de elementos básicos a día de hoy en un compacto (llantas, sistema multimedia, climatizador…).

Por otra parte, está claramente situado por encima de los compactos generalistas y no tiene nada que envidiar a un compacto premium, partiendo de un precio inferior. Además hay que sumar un buen comportamiento dinámico y un interior que huye de artificios pero que ofrece calidad y funcionalidad, porque no todo a día de hoy se basa en enormes pantallas. El Mazda 3 es una filosofía diferente de vehículo, más minimalista pero que te invita a disfrutar de cada kilómetro al volante.

Fotos | Equipo de pruebas