Prueba Jeep Wrangler 5p Rubicon 4xe 380 CV PHEV, bestia 4×4 y 0 Emisiones

El mundo del motor está sufriendo un cambio en el modelo de movilidad, lo que se refleja en una gama cada vez más electrificada, hasta el punto que modelos tan míticos como el Jeep Wrangler han pasado a ser híbridos-enchufables.

Así nace el Jeep Wrangler 4xe que hemos probado en su versión más potente fuera del asfalto: Rubicon. Este Wrangler Rubicon dispone de una motorización híbrida que ofrece hasta 380 CV de potencia, tracción total con reductora y una autonomía eléctrica de 45 km. ¿Realmente ahorra con respecto a su variante diesel? ¿Sigue siendo el Wrangler Rubicon 4xe un 4×4 de verdad?

Diseño: Acertada actualización de un 4×4 mítico

El Jeep Wrangler sufrió una puesta a punto muy acertada en 2019, con un nuevo interior mucho más moderno, y ligeros cambios exteriores, muy acertados. Nuestra unidad de pruebas con acabado Rubicon destaca por sus neumáticos M+S con un taqueado específico para uso off-road (medidas 255/75 R17), los ganchos de remolque a la vista en un llamativo color azul (propio de la versión 4xe) o los faros LED que ofrecen una iluminación sobresaliente.

Por dentro, si conseguimos subir ya que su carrocería es elevada, destaca el nuevo diseño del salpicadero, con la pantalla táctil protagonista en el centro y el cuadro de instrumentos parcialmente digital (todo un avance con respecto a la generación anterior).

La postura de conducción destaca por unos asientos muy verticales, y el volante en una situación más baja de lo habitual, no es una postura muy cómoda para hacer kilómetros, pero si, para su uso fuera de carretera. Aunque, la visibilidad es sobresaliente gracias a la altura del coche.

Las plazas traseras tienen un acceso complicado, por la altura y por una menor anchura de puertas, siendo justas para tres adultos y correctas en espacio para dos. No destacan por confort, pero incorporan salidas de aire, tomas de carga USB y un enchufe convencional de 220 V.

El maletero tiene bastante altura, con una capacidad de 533 litros. Se puede abrir el portón e independientemente el cristal. Como detalle característico está la rueda de repuesto, de tamaño normal, algo que hoy en día no se ve en casi ningún coche.

Motor y prestaciones: 2.0 ATX 380 CV PHEV

El sistema híbrido de este Jeep Wrangler Rubicon 4xe está formado por un motor de combustión, gasolina, de 2 litros con una potencia de 272 CV y por dos motores eléctricos (uno de ellos para mover el vehículo y otro para generar electricidad) sumando todo el conjunto una potencia de 380 CV y 637 Nm de par motor.

El motor y su conjunto es mucho más refinado que el anterior bloque diesel, aunque no llega a la finura de las versiones de seis cilindros que se venden en EE.UU.

La caja de cambios -de convertidor de par- no deja exprimir completamente cada uno de los caballos de este conjunto, aunque destaca especialmente la rápida aceleración cuando superamos las 4.000 vueltas, teniendo además un sonido característico.

Se nota que el conjunto está más enfocado a ofrecer una buena respuesta que a ser eco, puesto que no se comporta como los híbridos convencionales ni llega a circular grandes periodos de tiempo en modo eléctrico, ni en ciudad. Una vez que se acaba la batería, apenas se apaga el motor de combustión, salvo en descensos prolongados, circulación a baja velocidad o paradas.

Comportamiento: mejora en carretera, sobresaliente fuera de ella

La nueva generación del Jeep Wrangler trajo consigo una mejora notable del comportamiento en carretera, con más aplomo y más estabilidad que la generación anterior. Eso sí, esta apreciación se nota mucho más en la versión Sahara que equipa -sorprendentemente- neumáticos de carretera convencionales y no en nuestra unidad Rubicon, que equipa unos neumáticos M+S de tacos, que le restan mucha agilidad en carretera y autovía.

Partiendo de la base de los neumáticos que equipamos, el comportamiento es aceptable en carretera y claro está, sobresaliente fuera de ella en cualquier tipo de terreno.

Analizando más en detalle el comportamiento off-road, este Jeep Wrangler Rubicon 4xe, no le teme a ningún tipo de terreno. Dispone de varios tipos de tracción: 2h, 4×4 auto, 4×4 Part Time (50/50) y 4L (reductora). Junto a la tracción, el Rubicon, incorpora el bloqueo de los diferenciales delantero y trasero, así como la posibilidad de desconectar la estabilizadora, lo que nos permite salir a la aventura sin prácticamente límites de tracción.

Durante nuestras pruebas, hemos circulado por monte gallego, es decir, con pistas donde poner a prueba el agarre y la tracción con imprevistos que superan a lo que puede analizarse en un circuito 4×4 hecho para tal fin. Tanto avanzando por un cortafuegos, como circulando en barro, los neumáticos y el sistema de tracción se encargan de que todo vaya bien, lo máximo que hemos necesitado es conectar los bloqueos de diferencial además de la reductora.

Como detalle curioso, sí que se nota la presencia de mayor tecnología en la gestión de la tracción, algo que no era tan patente en la anterior generación, pero el resultado final es satisfactorio puesto que no es peor en campo que un 4×4 tradicional con el mismo tipo de neumáticos (hemos hecho un recorrido compartido con un Mitsubishi Montero del 98`con neumáticos de tacos, y ha estado a la altura).

Además del barro, otro de los campos donde se defiende muy bien es en nieve, gracias en parte a los neumáticos y a un buen sistema de tracción.

Para probarlo nos desplazamos a la zona de los Ancares, recorriendo varios caminos nevados a una altitud de 1600 metros, parte del recorrido era nieve dura (con hielo por debajo) y un espesor de 20 cm, avanzando sin problema y con seguridad, mismo en bajada donde el control de descenso combinado con la reductora mantiene el Wrangler Rubicon en todo momento controlado. Precisamente la gestión de la reductora con el control de descensos, es uno de los puntos donde más se nota la tecnología, pero cumple y no penaliza con respecto a una reductora clásica.

Consumo: batería que puede alcanzar los 45 km en modo totalmente eléctrico

Este Jeep Wrangler Rubicon 4xe equipa una batería de 17,3 kWh, lo que nos permite recorrer en modo totalmente eléctrico un máximo de 45 km, aunque la cifra en condiciones poco favorables ronda los 30 km.

Gracias a la batería, el consumo medio en los primeros 100 km (medido en autovía) es de 8 litros a los 100 km. Con la misma prueba pero en carretera (batería cargada y 100 km recorridos) el consumo baja hasta los 6,5 litros a los 100 km (no he sido capaz de llegar a los 4,1 l/100km que declara en ficha).

Una vez que se acaba la batería, las cifras de consumo medio rondaron los 10,5-11 litros a los 100 km. Aunque pueda parecer mucho, con las cargas de batería, se consigue en los primeros kilómetros tener un consumo ajustado, y muy alejado de las cifras de su equivalente diesel.

Eso sí, una mejor gestión del sistema eléctrico podría mejorar el consumo y la eficiencia, como por ejemplo, levas para controlar la regeneración de energía (sólo tiene un botón para este fin) o la posibilidad de carga rápida, lo más rápido son 2,5 horas y lo más lento 6 horas.

Equipamiento

Con el acortamiento de la gama Wrangler y al sólo estar disponible este motor híbrido-enchufable, la gama se ha simplificado y sólo hay dos acabados disponibles, ambos muy equipados: Sahara y Rubicon.

El acabado Sahara ya incorpora los faros full-LED con una iluminación sobresaliente, el equipo de navegación con pantalla táctil y un sistema de sonido firmado por Alpine de 9 altavoces (con una excelente calidad de sonido), asistente de ángulo muerto del retrovisor, entre otros.

El acabado Rubicon suma elementos propios del acabado, como los neumáticos específicos, franja en el capó negra, cámara frontal off-road y cristal reforzado «Gorilla Glass».

Opinión personal y precio

La gama del Jeep Wrangler 4xe arranca en los 72.450 del acabado Sahara y 74.350 del Rubicon, un precio elevado, pero al menos viene completo en cuanto a equipamiento. El Jeep Wrangler, especialmente esta unidad Rubicon, es uno de esos vehículos míticos, carismáticos y con una presencia única.

Hasta ahora no disponía de versión híbrida enchufable, pero hoy en día es la única versión disponible en nuestro país (frente a la nutrida gama americana). Esto puede ser una fortaleza y una reinterpretación de como se puede hacer, en pleno 2022, un todoterreno y al mismo tiempo ser ecológico y consumir poco (aunque sea durante los 40 km que dura la carga de la batería).

Lo bueno, es que que la carga tecnológica no ha perjudicado sus capacidades off-road, más bien, las complementa. En definitiva, que se trata del primer 4×4 de verdad que está disponible en versión híbrida y eso nos permite usarlo en ciudad o recorridos cortos consumiendo sólo electricidad y a día de hoy esto hace que no tenga rival.

Eso sí, para quien se decida por esta versión Rubicon, que lo saque al campo, porque sus neumáticos, capacidades y aptitudes están dirigidas a esa función y no a carretera.

Fotos | Equipo de pruebas