Prueba Alfa Romeo Giulietta GLP: Día 1 Perpiñán > Mónaco

Nos montamos en el Alfa Romeo Giulietta de GLP que hemos podido probar por Europa, giramos la llave y encendemos el motor para empezar con el primer día de ruta por el sur de Francia. En esta serie de artículos te vamos a contar detalles del coche, nuestras impresiones de conducción y curiosidades.

Pero también queremos que hagáis turismo con nosotros, así que te contamos los lugares que más nos han impresionado, ciudades que visitar o curiosidades de conducción en los diferentes países que hemos cruzado en coche. Con la primera puesta, arrancamos desde el sur de Francia…

Día 1: Perpiñán > Mónaco [677 km-Sin Peaje]

La ruta la empezamos en el sur de Francia, pero no nos hemos teletransportado, el día 0 hicimos el recorrido entre Madrid y Perpiñán, pero fue una ruta rápida por autovía y con pocas paradas. En Perpiñán nada más empezar el día tenemos que buscar un concesionario Alfa Romeo para comprar un adaptador de GLP para el país vecino (España y Portugal tienen un adaptador, Francia e Italia otro, Alemania otro….). Como ya nos ha pasado en otras ocasiones, al final recurrimos a una tienda de recambios que nos indican desde el concesionario oficial y en poco tiempo problema resuelto.

Al salir de Perpiñán, todo por carretera evitando las autopistas de peaje, la ruta transcurre por un paisaje lleno de viñedos y pequeños pueblos donde no falta el mítico «Chateaux» que vende vino y productos típicos. En el interior de la Costa Azul hay un pueblo en el que es muy recomendable parar, Carcassonne.

Este pueblecito medieval con muralla (declarado Patrimonio de la Humanidad) y muy bien conservado (como casi todos los pueblos medievales en Francia) destaca por su singularidad como por su ubicación en mitad de la provenza francesa, rodeado de viñedos.

Nuestra siguiente parada será Séte, un pequeño pueblo costero con varios canales de agua que cruzan la zona centro. De camino a Sète pasamos por playas enormes que están completamente vacías (en pleno mes de septiembre) pero que seguro estarán a tope en el verano. En Sète aprovechamos para comer y ponemos rumbo a Marsella.

Interesante ciudad Marsella, recomendamos tener mucho cuidado al conducir por la ciudad, es una ciudad difícil pero el tráfico es realmente un kaos. Es una ciudad muy grande, que tiene mucho tráfico y está mal gestionado, constantemente se cruzan coches, hay que tener cuidado con las motos que adelantan por cualquier lado y si en una calle hay un obstáculo, ojo con los coches porque lo sortearán de cualquier manera.

Tras dejar el kaos nos ponemos rumbo a ST-Tropez (la Marbella de la Costa Azul), de camino evitando la autopista, pasamos por por una ruta en la montaña llena de curvas y de bonitos paisajes, donde ponemos a prueba el dinamismo del coche, para finalmente llegar a Toulon (pueblo típicamente turístico lleno de grandes yates).

Empieza a hacerse de noche y llegamos a ST-Tropez, es un pueblo costero muy pequeño pero cargado de lujo y grandes yates (grandes no, mega-yates) en el puerto. El tráfico de vehículos de alta gama (Rolls Royce, Bentley, Porsche,…) es habitual en el puerto. Era viernes tarde-noche, y pudimos ver en el puerto varios yates con varias plantas, curiosamente uno de ellos alquilado por una empresa afín a Google (según nos comentó la tripulación).

Dejamos atrás el lujo de ST-Tropez y continuamos el camino hacia Cannes, con su gran paseo marítimo y sus lujosos hoteles. Seguimos hacia Niza, nuestra última parada de hoy para al día siguiente pasar a Mónaco (está a media hora de Niza) y seguir hacia Italia. Tanto Cannes como Niza, destacan por sus paseos al lado del mar, y sus fastuosos hoteles. Es curioso, que en ambas ciudades la playa está «ocupada» por restaurantes, cafés, etc, que te obligan a pagar por usarla, dejando un espacio pequeño de playa totalmente gratuito.

Y cuidado con los horarios, estamos en Europa, en los pueblos desde las 7 de la tarde ya no te sirven un simple café «la máquina está limpia ya» y para cenar no demoremos más de las 10 de la noche. Lo curioso es que en una ciudad tan turística como Niza, en pleno viernes, a las 12 de la noche apenas el Mcdonalds estaba abierto para cenar algo.

Y si queremos ir a un comercio, empresa o similar, el horario de la comida es desde las 12 de la mañana hasta las 2 de la tarde, cualquier taller o tienda estarán cerrados en este horario.

Impresiones de conducción

Como os adelantamos en el primer artículo, este Alfa Romeo Giulietta de GLP era una prueba muy interesante, porque era la primera vez que podíamos analizar con detalle un coche propulsado a autogas y con motor gasolina turbo.

La mecánica es un 1.4 Turbo que desarrolla 120 CV, un motor muy prestacional gracias al turbo y una buena alternativa al diesel. Siendo sincero, pensaba que al funcionar con GLP la respuesta iba a ser mucho más tranquila, pero se nota que desde Fiat Powertrain (los creadores del motor) han hecho un buen trabajo.

Nada más sentarnos en el coche vemos un puesto de conducción al estilo Alfa, es decir, con la deportividad como base. Ya sea por su instrumentación, por los asientos que recogen muy bien el cuerpo, por el volante o por la presencia del DNA, pero se nota el estilo deportivo.

Hablando de instrumentación, nos ha sorprendido que estuviera en italiano y al ser el modelo con GLP el ordenador de abordo no ofrece datos sobre consumo medio, autonomía o consumo instantáneo. Sin mucho tiempo para reparar en los demás detalles, arrancamos desde Madrid y nos ponemos en ruta.

Para funcionar con GLP o gasolina, hay un mando cerca de la palanca de cambios que nos indica la carga del depósito de gas y nos permite elegir el modo de funcionamiento. Si ponemos GLP y se agota, automáticamente pasa a gasolina sin que tengamos que hacer nada.

El primer depósito de autogas nos dura 440 km (teniendo en cuenta que tiene una capacidad de aprx. 37 litros) el consumo de GLP en autovía ronda los 8 litros a los 100 km. La cifra se acerca a la media de consumo en gas que tendrá durante toda la ruta, pero debemos recordar que el litro está a 0,80 euros.

Con los primeros kilómetros notamos el tacto deportivo de la caja de cambios, de seis relaciones, y en una zona de curvas bajando a Toulon a través de la montaña, ponemos a prueba su dinamismo. Nos gusta la respuesta, es un coche muy ágil con unas suspensiones que tienen un acertado punto medio entre el dinamismo y el confort (pese al bajo perfil de sus neumáticos).

Precisamente en esta zona de curvas en la montaña, conectamos el modo Dynamic del DNA, pese a sus 120 CV es muy divertido, el turbo hace muy bien su función y el coche nos saca más de una sonrisa. Los asientos recogen bien el cuerpo, con una buena sujeción lateral en zonas de curvas.

Al principio pensaba que sus 120 CV no iban a dar para muchas alegrías, pero a medida que la ruta avanza me doy cuenta que la respuesta del motor es buena, que con GLP no notamos una excesiva pérdida de potencia (algo que si ocurre con los motores atmosféricos de gasolina) y que es un coche divertido para disfrutar de las carreteras de curvas o simplemente trazar con agilidad las diferentes e inacabables rotondas que nos esperan a la entrada y salida de los pueblos franceses.

En la siguiente etapa arrancamos desde Mónaco y cruzamos al país nativo de nuestro Alfa Romeo, destino Milán.

Fotos | Equipo de pruebas de Highmotor