Prueba 508 Peugeot Sport Enginereed, un deportivo familiar híbrido enchufable

Inaugura una nueva familia de vehículos firmada por Peugeot Sport Enginereed, una división específica que se ocupará de los modelos de altas prestaciones de la marca apoyados en la electrificación, que pretende competir con las firmas específicas deportivas RS, M o AMG, de Audi, BMW y Mercedes, buscando menores emisiones y mayor eficiencia.

A partir del mes de abril estará disponible por 62.200 euros en el caso de la carrocería berlina de cinco puertas y de 63.400 para el familiar SW, incluyendo las promociones que ofrece la marca, aunque se podrían conseguir precios más ventajosos, con rebaja de hasta 2.900 euros si se accede a la financiación o a la entrega de un vehículo usado.

El nuevo 508 Peugeot Sport Enginereed está basado en las dos siluetas disponibles del modelo, berlina y SW, pero se caracteriza por algunos detalles estéticos que lo hacen muy especial, como el frontal con una parrilla específica con el logotipo de la marca en negro Onix y las garras distintivas pintadas en verde kryptonita, elementos aerodinámicos en los laterales de los paragolpes, salidas de escape en negro electrolítico, entradas de aire pintadas también en verde kriptonita en el faldón delantero, difusor de aire posterior o las llantas de aleación específicas de 20 pulgadas con neumáticos Michelin Pilot Sport 4S 245/35. Se ofrece en tres colores diferentes, uno de ellos específico (Gris Selenium) y exclusivo para esta versión deportiva.

El interior también ha sido modificado convenientemente para la ocasión, con un volante de cuero con pespuntes en verde, al igual que los asientos deportivos, tapizados en piel y Alcantara, que se encuentran calefactados y disponen de función masaje. La instrumentación del cuadro de instrumentos es la misma de las otras ediciones del modelo (12,3 pulgadas), pero incluye los gráficos, agujas y detalles en el mismo color verde que se emplea en detalles de carrocería e interior.

No hay diferencia de espacio en las plazas o en el maletero respecto a las versiones “normales” del 508. En lo que sí se distingue respecto a otros modelos es en la forma de comercialización, ya que se llevará de forma exclusiva en los denominados PSE Expert Center, concesionarios específicos que contarán con unidades de demostración y personal con formación especializada. En la actualidad ya hay 15 de ellos en España, pero la intención es que este número aumente significativamente a lo largo de este mismo año.

Puesta a punto específica

No solo la hay detalles en carrocería e interior. También el bastidor ha recibido modificaciones importantes para poder digerir el incremento de potencia respecto a las otras versiones del modelo. Para empezar, cuenta con barras estabilizadoras de mayor diámetro, vías más anchas (24 mm delante y 12 mm detrás), suspensiones específicas con ajuste variable y muelles más cortos que permiten rebajar la altura de la carrocería 11 mm delante y 4 detrás, dirección con una calibración más precisa o frenos de disco delanteros ventilados de 380 mm con pinzas de cuatro pistones.

También la programación del ESP y del control de tracción ASR ha sido modificada para favorecer un comportamiento más dinámico y el sonido en modo sport se encuentra amplificado artificialmente por el equipo de sonido Focal de alta potencia.

Esta versión tan especial está basada en la variante híbrida del modelo, con quien comparte la parte eléctrica. Cuenta con un motor de gasolina de cuatro cilindros y 1,6 litros que proporciona 200 CV y dos motores eléctricos, uno delantero de 81 kW (110 CV) y otro situado en el eje trasero de 83 kW (113 CV) que se asocian a una caja de cambios automática de ocho velocidades con accionamiento eléctrico y función de regeneración “B”, brake.

El conjunto de mecánicas es capaz de proporcionar hasta 360 CV y 520 Nm de par si se activa el modo Sport y 140 CV en modo exclusivamente eléctrico (el trasero es capaz de funcionar hasta 190 km/h), si bien pueden actuar uno o dos motores, dependiendo del modo de conducción seleccionado y de las condiciones de adherencia.

Prestaciones de primer orden

Anuncia una aceleración de 0 a 100 Km/h en 5,2 segundos, unas recuperaciones de 80 a 120 km/h en 3 segundos, recorre el kilómetro con salida desde parado en 24,5 segundos, una velocidad máxima de 250 Km/h (hasta 140 km/h con el motor eléctrico), y promete 46 g/km de CO2 y. Además, homologa hasta 42 km de autonomía en modo exclusivamente eléctrico, lo que le otorga el distintivo Cero de la DGT y sus correspondientes ventajas en algunas zonas.

Cuenta con cinco modos de conducción. En Comfort selecciona el funcionamiento más suave de las suspensiones y una mayor asistencia de la dirección, mientas que el modo Sport, anticipa el recorrido del acelerador, endurece las suspensiones, se muestra más permisivo en las preferencias del ESP y del control de tracción y configura la dirección con menor asistencia. También incluye un modo 4WD que permite la propulsión posterior en modo eléctrico, independientemente de la carga de batería, sin ninguna conexión mecánica con el eje delantero, con un reparto entre ejes es del 43/47.

Como en otros modelos del grupo, permite seleccionar la reserva de energía en un trayecto para usarla cuando sea conveniente. Cuenta con una batería de 11,5 kWh bajo el asiento trasero que no resta capacidad de carga ni al habitáculo ni al maletero. Para poder cargarla, además de poder utilizar el motor de gasolina y el sistema de regeneración en deceleraciones y frenadas, puede conectarse a la red eléctrica, bien con un enchufe doméstico de 8A, uno reforzado de 16A o un wallbox de 32A, con lo que los tiempos de carga varían entre 7 y 2 horas ya que 3,7 kW es la potencia que absorbe el cargador embarcado del coche, si bien, en opción, puede solicitarse uno de 7,4 kW.

En carretera se muestra firme y transmite gran confianza, pues gira muy plano y permite afrontar curvas enlazadas sin ningún tipo de reproche; es rápido, muy preciso y eficaz. Dispone de energía suficiente para permitir unas cifras de aceleración espectaculares. El incremento de peso que proporcionan las baterías y los motores eléctricos se nota, pues representa más de 400 kg respecto a las versiones no hibridadas, y alcanza 1.850 kg en el caso de la berlina y 1.875 kg en el caso de la carrocería SW. No obstante, el buen trabajo de las suspensiones y de los frenos de mayores dimensiones permite un excelente comportamiento dinámico.