El nuevo Porsche 911 ya entra en su última fase de pruebas antes de su inminente llegada
Porsche ya se ha encaminado hacia la última fase de pruebas con el nuevo 911, un modelo que promete importante novedades y que verá la luz en el año 2019.
El segmento de los deportivos y de los superdeportivos ha sido visitado desde sus inicios por un modelo que se inscribe en ambas categorías con sus diferentes variantes, el Porsche 911. La firma germana lleva trabajando con este modelo desde tiempos inmemorables, y ahora que se octava generación está a punto de aterrizar en el mercado, los de Stuttgart nos lo han querido demostrar de la mejor manera posible. La última entrega del 911 está enfrentándose a las pruebas finales antes de entrar en la cadena de producción, Porsche nos ha querido hacer participes de cómo su nueveonce más tecnológico es llevado hasta los límites.
Dar cabida a una nueva generación de un vehículo nunca es fácil, pero lo es aún menos cuando se trata del Porsche 911, un deportivo que destaca por su innegable efectividad y precisión de bisturí sobre la pista. Con la llegada de su última versión, los ingenieros alemanes han tenido que mejorar multitud de aspectos que ya de por sí presentaban un nivel de perfección muy alto pero, por si no fuera suficiente, estas novedades han sido puestas a prueba en las condiciones más adversas.
Para ello, Porsche ha acudido con las mulas de prueba de lo que será su 911 a lugares donde ningún propietario acudirá, pero que ha sido necesario para cerciorarse del correcto funcionamiento de sus elementos. Con esta premisa, la firma germana ha acudido a localizaciones con una climatología adversa, buscando que su nuevo deportivo se enfrente tanto al frío como al calor extremo.
De esta forma, los ingenieros no solo han podido comprobar la calidad de los nuevos materiales empleados en este 911, sino también analizar su resistencia y su comportamiento ante dichas situaciones. Para provocar dicho experimento, la octava generación del deportivo germano ha estado a 90 metros bajo el nivel del mar y, como contraste, también ha acudido al Monte Evans en Colorado, donde se ha puesto a prueba al sistema biturbo del nuevo 911.
La ciudad y los atascos también han sido uno de los escenarios principales del Porsche 911, un deportivo que destaca por su polivalencia para ser usado tanto para acudir al circuito como para el día a día. China ha sido el país escogido para que el 911 circule por sus congestionadas carreteras, con el objetivo de medir su comportamiento cuando su motor está experimentado cambios muy bruscos y seguidos, al igual que la transmisión.
Después de casi tres millones de kilómetros recorridos a bordo de las mulas de pruebas del Porsche 911, la octava generación está prácticamente lista para darse a conocer. Será a principios del año 2019 cuando la firma germana desvele en primicia a su deportivo por excelencia, algo que también nos lleva a concluir que será en el Salón de Ginebra donde podamos conocerlo con lujo de detalles.
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