El Ford Kuga ahora podrá resaltar su deportividad con el paquete Black en función del acabado elegido, además de ser más cómodo gracias a los asientos confort
La planta de Ford en Almussafes, otra víctima de los recortes en coches eléctricos
La planta valenciana se encuentra en serio peligro una vez se han congelado las inversiones previstas para la producción de modelos eléctricos en España.
La transición hacia la movilidad eléctrica no está funcionando como se esperaba. Los Vehículos de Movilidad Personal (VMP), como los patinetes y las bicicletas eléctricas están tomando su lugar en las ciudades, pero en lo que respecta a los coches y otros vehículos, a nivel comercial no acaban de funcionar como se esperaba. Ya vimos en un artículo anterior como Volkswagen se ha visto obligada a reducir los turnos de fabricación del Volkswagen ID.3 y el CUPRA Born. Hoy, nos llega otra noticia negativa al respecto.
La planta de Ford en Almussafes, Valencia, no va a recibir la inversión que estaba esperando para la fabricación de coches eléctricos. Ford es una de las marcas que ha querido participar de forma activa en el cambio hacia los coches eléctricos y para ello, Europa se ha convertido en un escenario muy importante para hacerlo.
El Ford Explorer, retrasado
La compañía estadounidense ha establecido alianzas con empresas como Volkswagen, junto a la que va a desarrollar el Ford Explorer, gracias a la plataforma MEB. Sin embargo, se ha anunciado que este modelo va a sufrir varios retrasos en el mercado y no llegará al mercado en las fechas planteadas. Pero esto es solo la punta del iceberg.
Los ejecutivos de Ford han recortado su previsión en lo que respecta a nuevos modelos eléctricos y una de las plantas afectadas ha sido la planta de Almussafes. Esta fábrica iba a recibir una importante inyección de dinero para afrontar esos nuevos retos. Esto garantizaba la superviviencia de la planta a lo largo de los próximos años y significaba una tabla de salvación para ella.
Pero con las inversiones congeladas, el futuro de Ford en este pueblo valenciano queda una vez más en el aire. Se podría proponer un ERE, que dejaría a miles de personas sin trabajo, así que el futuro de la planta es incierto.
Sin embargo, no todo se percibe tan oscuro. Una alternativa a la fabricación de coches eléctricos es la producción y comercialización de vehículos híbridos, que podrían ocupar el espacio de los modelos eléctricos, mientras el público se va animando a acercarse a la movilidad eléctrica.
La esperanza es que se puedan fabricar 200.000 vehículos cada año, lo que permitiría mantener a la planta en funcionamiento. Por ahòra, en Almussafes se fabrica el Ford Kuga, el modelo más popular de la marca en Europa y varios vehículos comerciales. Todos ellos dejarán de fabricarse en Valencia dentro de unos años, debido a la reestructuración de la compañía.
Es pronto para saber en qué derivará toda esta situación, pero desde luego, los últimos movimientos de las marcas preocupa a todos los integrantes del sector de la automoción.
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