Coches Eléctricos ECO Tecnología
¿Para qué sirve la bomba de calor en un coche eléctrico?
Si vas a comprar un coche eléctrico y dudas sobre si debe tener o no bomba de calor, aquí te contamos cómo funciona y para qué sirve.
Homologar la máxima autonomía es una de las premisas para los fabricantes de coches eléctricos. Una de las formas de hacerlo es instalando baterías de mayor capacidad. Pero aunque la cosa está cambiando a pasos acelerados, el coste de las baterías de los coches eléctricos todavía es elevado, además de su mayor peso. Otros campos de actuación para “arañar” kilómetros de autonomía pasan por reducir la resistencia aerodinámica.
Pero existe un elemento que cada vez se utiliza más en los coches eléctricos como solución técnica que mejora la autonomía: la bomba de calor. O más bien, en vez de hablar de mejorar la autonomía, deberíamos decir que evita que ésta se reduzca de forma alarmante si utilizamos mucho la calefacción en climas muy fríos. Por cierto, esta tecnología no es exclusiva de los coches eléctricos: en 2015, cuando todavía no tenía ningún modelo 100% eléctrico en su gama, Audi fue el primer fabricante en incorporarla a un híbrido enchufable, el Q7 e-tron.
En algunos casos, sobre todo en modelos premium o en las versiones más equipadas de coches eléctricos más populares, la bomba de calor forma parte del equipamiento de serie. En otros puede ser una opción a pagar como un extra. Y hay coches eléctricos que directamente no contemplan esta posibilidad, o sólo la ofrecen para algunos mercados, por lo general en países con climas muy fríos.
¿Cómo funciona la bomba de calor de un coche eléctrico?
La bomba de calor permite aprovechar el calor residual de los componentes eléctricos del vehículo para climatizar el habitáculo. Estos componentes que generan calor son, principalmente, los motores eléctricos del sistema de propulsión, pero también lo hacen los cargadores de a bordo, los inversores o las propias baterías.
La bomba de calor utiliza un refrigerante que circula por un circuito a una presión elevada. El calor residual de los componentes eléctricos se utiliza para calentar este refrigerante y hacer que pase de estado líquido a gaseoso. Este gas se descarga hacia un condensador para pasar de nuevo a estado líquido.
El proceso genera una energía térmica adicional que la bomba de calor se encarga de recuperar para calentar el habitáculo de forma hasta tres veces más eficiente que lo haría un sistema de climatización convencional, lo que permite reducir el consumo eléctrico y, por lo tanto, aumentar la autonomía.
¿Cuánto cuesta la bomba de calor de un coche eléctrico?
En modelos en los que se ofrece opcionalmente, como por ejemplo el nuevo Audi Q4 e-tron, la bomba de calor tiene un precio de 1.120 euros.
Puesto que el efecto positivo de la bomba de calor en la autonomía de un coche eléctrico se nota especialmente a temperaturas inferiores a 0 grados centígrados, no debes preocuparte si el coche eléctrico que vayas a comprar no ofrece de serie esta tecnología, ni considerarla como una de las primeras opciones por las que pagar como un extra… salvo que vayas a conducir habitualmente en situaciones de muy baja temperatura exterior.
Deja un comentario