Los paneles de instrumentos de BMW avanzan hacía la digitalización gracias al denominado «S.O. 7.0»
Con la llegada de la nueva generación del BMW X5, la marca alemana incorporará un nuevo panel de instrumentos y consola digital en un mismo plano y configurable
El mundo digital paso a paso ha ido entrando en todos los vehículos, de manera que ahora, en hasta casi cualquier simple utilitario, vemos sistemas de infoentretenimiento táctiles que nos permite navegar por diferentes funciones de nuestros vehículos, como por ejemplo en materia de conectividad, dejando prácticamente de lado los radio CDs que durante tantos años nos han acompañado.
Lógicamente, dependiendo de la marca, segmento y público al que vaya dirigido el vehículo en cuestión, el nivel de tecnología digital irá en aumento. Si nos vamos a marcas premium, esta digitalización invade a todas sus gamas de una manera u otra, aunque quizás es en este sentido donde Mercedes-Benz ha tomado la delantera, introduciendo en el nuevo Clase A el nuevo sistema multimedia MBUX, un sistema que hasta no hace mucho únicamente lo reservaban para sus modelos superiores como el Clase E.
Es este sentido donde BMW tampoco quiere quedarse atrás respecto a su competencia, más aun cuando la marca bávara fue uno de los pioneros en este tipo de tecnología en el año 2001, cuando introduciendo en sus modelos la primera versión del iDrive. Por aquel entonces el sistema iDrive de BMW era un sistema multimedia con una pantalla a color, controlada por una ruleta situada a la altura de la palanca de cambios, evolucionando hasta lo que conocemos hoy en día, con pantallas táctiles que además permiten el control por voz y el control gestual a través de la evolución moderna de la ruleta.
El siguiente paso que quieren dar en BMW gira en el mismo sentido que el sistema multimedia MBUX de Mercedes-Benz, en donde tendremos una pantalla para el cuadro de instrumentos digital y otra para el monitor de control de la consola central, manteniendo un diseño uniforme en el conjunto de ambas pantallas. La estructura de ambos menús será plana, de manera que se garantice un acceso rápido a todas las funciones y configuraciones disponibles.
En la pantalla del panel de instrumentos veremos que nos mostrarán diferentes configuraciones de visualización, que variará en función del modo de conducción que hayamos elegido, además de su color. Mientras tanto, en el monitor de control podremos disfrutar de contenido en tiempo real, con la posibilidad de tener hasta diez páginas del menú principal que serán totalmente configurables al gusto del conductor, las cuales a su vez contiene entre dos y cuatro paneles.
La primera versión de este sistema que han apodado como «Sistema Operativo BMW 7.0» no tardaremos en verlo, concretamente antes de que finalice este 2018, cuando el BMW X5 sea el primero en incorporarlo en su nueva generación. Más tarde, y progresivamente, se irá introduciendo en más modelos de BMW.
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