OMODA y JAECCO son las dos marcas chinas que llegan a España este verano

Los coches chinos eran algo que se veía lejano, coches de baja calidad que imitaban a varios modelos conocidos en occidente, pero de repente nos hemos encontrado con que ya están aquí y van ocupando una cuota de mercado cada vez más grande. Este verano llegan dos nuevas marcas desde el país asiático, aunque están bajo el paraguas del mismo fabricante, la multinacional Chery.

La llegada de ambas marcas está prevista para finales del mes de junio, aunque ya se ha visto uno de sus modelos matriculados en nuestro país. Por el momento, el primer concesionario que comenzará a comercializar estas marcas en España será Grupo Rafael Alfonso, en Canarias. Pero pronto comenzará la expansión por todo el territorio español para comenzar a ser conocidas por los posibles compradores.

La entrega de las primeras unidades ya se ha realizado en la planta de Chery en Wuhu, China, y pronto llegarán hasta los concesionarios del grupo comercial canario. En el acto de entrega han participado miembros de la ejecutiva de la multinacional china y representantes de la empresa española.

En principio estarán presentes en tres concesionarios en el archipiélago, aunque se incorporará un cuarto a lo largo del año 2024. Poco a poco, es espera también que se vayan expandiendo por el resto de comunidades autónomas, además de en otros países europeos.

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El Omoda 5, su primer modelo

El primer modelo que llegará a España será el Omoda 5, que ya cuenta con una unidad matriculada en España. Este crossover llegará, en principio, con un motor T-GDi de 1.6 litros de cuatro cilindros sobrealimentando. Este ofrece una potencia de 197 CV y está asociado a una caja de cambios automático de siete velocidades y ofrece tracción delantera.

Más adelante llegará una versión eléctrica, que ofrece un motor con una potencia de 150 kW, que equivalen a 204 CV. En principio, contará con una batería de 64 Kwh, lo que le permitirá contar con una autonomía de 450 kilómetros. Eso sí, estas cifras corresponden, en principio, a la homologación CLTC, que es menos exigente a la europea WLTP.