El nuevo Mercedes-Benz GLE desvela finalmente su nueva identidad

En el día de ayer Mercedes nos anticipaba una imagen entre sombras de lo que será la nueva generación del GLE, el SUV por excelencia de la marca germana que comenzó su andadura allá por el 1997 bajo la denominación ML consiguiendo un amplio reconocimiento. Desde entonces ML ha evolucionado hacía el SUV tan atractivo que podéis ver entre estas líneas, cambiando además por el camino su denominación a GLE en el 2015 en su tercera generación.

En Mercedes, al igual que el resto de marcas, saben de la importancia que el segmento SUV tiene en el mercado y especialmente los denominados premium que es donde batalla el GLE, un nicho de mercado en el que varios pequeños detalles puede marcar la diferencia respecto a la competencia. De ahí que al GLE le haya llegado la hora de renovarse y ponerse a punto para el próximo Salón de París, adoptando parte de la línea de diseño de las últimas presentaciones de la marca y volviéndolo a la par aun más atractivo si cabe.

Exterior atlético y agresivo

Como podéis ver su imagen exterior se ha visto totalmente actualizada, pero sigue manteniendo una fuerte presencia que refuerza su diseño SUV gracias a las líneas otorgadas. En su frontal nos encontramos con un nuevo parachoques que sirve además para proporcionarle unas nuevas entradas de aire, pero también sirve para que el diseño de la parrilla se vea modificada en su forma, albergando unas nuevas líneas horizontales cromadas que ahora abrazan a la estrella de Mercedes, además de un nuevo grupo óptico Multibeam LED que contiene las luces diurnas con nueva firma.

En el lateral será el lugar donde menos diferencias encontraremos, aunque si las hay, como el nuevo diseño para la carcasa de los retrovisores y una forma ahora redondeada para la ventanilla trasera, que se fusiona perfectamente con el característico pilar C del Mercedes GLE, además de líneas más sencillas para las puertas pero que son prominentes a media altura hasta llegar a la zaga. Es aquí donde, al igual que sucede con el frontal, nos encontramos con una imagen ahora más atlética y fuerte, reforzada por el nuevo diseño del parachoques y un nuevo grupo óptico trasero LED que refuerza una mayor agresividad.

Interior totalmente renovado y tecnológico

Una vez que abrimos sus puertas y accedemos al interior no encontraremos ningún detalle que no haya sido modificado respecto al modelo saliente, incorporando una mayor dotación tecnológica como el salpicadero presidido como ya es habitual por el característico MBUX de Mercedes compuesto por dos pantallas de 12,3 pulgadas, el cual por cierto ha sido mejorado incorporando nuevas características como el diseño de los menús o el asistente inicial de configuración, que además permite cuatro modos de visualización.

Pero como imaginaréis estas no serán las únicas novedades tecnológicas que podrán usar los ocupantes del Mercedes GLE, ya que el sistema MBUX cuenta también con realidad aumentada para el navegador, asistente por voz, función predictiva o sugerencias que, por ejemplo, nos invitarán a sintonizar nuestra emisora de radio favorita. También contará con sistema de reconocimiento de gesto, que nos permitirá activar o desactivar funciones como encender o apagar la luz de lectura simplemente con acercar la mano al retrovisor interior; o podremos utilizar el Head-Up Display a todo color.

Los ocupantes además estarán rodeados de materiales de alta calidad, como es lo habitual en la marca, pero también gozarán de una mayor comodidad gracias al aumento de espacio disponible especialmente en las plazas traseras, que ahora contarán con 69 mm a mayores, junto con una mayor capacidad en el maletero que ahora aumenta hasta los 825 litros que se elevarán hasta los 2.055 litros si abatimos los asientos en el ratio 40:20:40. Cabe destacar que equipando la suspensión neumática Airmatic, el GLE podrá reducir su altura en 40 mm con solo apretar el mando para cargar y descargar el maletero con mayor comodidad.

Nuevo motor gasolina con función EQ Boost

Mecánicamente desde el momento de su lanzamiento al mercado el nuevo Mercedes-Benz GLE contará con un nuevo motor gasolina (GLE 450 4Matic) de seis cilindros en línea, el cual entrega una potencia de 367 CV junto con un par motor de 500 Nm, auxiliado por un sistema eléctrico de 48 voltios y la función EQ Boost, que añade 22 CV de potencia y 250 Nm de par motor en momentos puntuales. Este motor marca un consumo combinado que oscila entre los 9,6 y los 8,3 l/100 Km y unas emisiones de CO2 que también oscilan entre los 220 y 190 g/Km.

Mas adelante se añadirán nuevas mecánicas diésel y una híbrida enchufable a la gama, aunque todas ellas irán asociadas a la transmisión automática de nueve velocidades 9G-Tronic y la tracción integral 4Matic. En las versiones equipadas con motor de cuatro cilindros el sistema 4Matic tendrá un reparto de par fijo en un ratio de 50:50, mientras que las versiones que equipen motor de seis cilindros se utiliza la nueva función Torque on Demand en la que el reparto de par es variable, de 0 al 100% en función de las necesidades del momento.