Nuevo BMW M4 CSL: ¡el Rey de la pista!

Mil unidades. Esa es la cifra que BMW va a fabricar en edición limitada del nuevo BMW M4 CSL, un modelo que se presenta como parte de los lanzamientos y actividades que la parca está llevando a cabo con motivo del 50 aniversario de BMW M GmbH. Y como todos los BMW que lucen las siglas CSL, todas las modificaciones que incluye tienen un único objetivo: convertirse en el «rey de la pista».

Un dato que ya nos habla del nivel del nuevo M4 CSL es el registro conseguido en las pruebas que BMW ha realizado en Nürburgring, utilizando el trazado de 20,6 km que le sirve de comparación con otros modelos: su tiempo, de 7 minutos y 15,677 segundos (7 m y 20,207 s en el trazado completo de 20,8 km) coloca al BMW M4 CSL como el modelo de calle más rápido de los producidos por BMW hasta la fecha. Aprovechamos aquí para completar alguna cifra que da una idea de su potencial: la aceleración de 0 a 100 km/h se cubre en 3,7 segundos, y necesita apenas 10,7 segundos para alcanzar los 200 km/h con salida parada.

Potente y ligero: las claves de la eficacia del BMW M4 CSL

La base de partida para la versión CSL es el BMW M4 Competition. A grandes rasgos, bastaría con decir que el motor gana 40 CV para alcanzar los 550 CV de potencia, y que el peso total se ha aligerado en 100 kg. El resultado de combinar estas dos cifras es importante, pues con 1.625 kg de peso en orden de marcha, la relación peso-potencia se queda en 2,95 kG/CV.

El 6 cilindros en línea de alto rendimiento con la tecnología de competición del BMW M4 GT3 rinde su potencia máxima de 550 CV a 6.250 rpm, y alcanza un par máximo de 650 Nm entre 2.750 y 5.950 rpm. Respecto al motor del M4 Competition, los dos turbocompresores mono-scroll suben la presión de soplado de 1,7 a 2,1 bar, y se añaden las modificaciones en el sistema de refrigeración y de engrase para responder a las exigencias de la conducción en circuito. La potencia llega a las ruedas traseras a través de una caja de cambios M Steptronic de 8 marchas. Tanto los soportes del motor como de la caja de cambios son específicos.

En cuanto a la cura de adelgazamiento, solo los asientos tipo baquet M de fibra de carbono reducen 24 kg. Suma otros 21 que se ganan al eliminar los asientos traseros y los cinturones de estas plazas, otra veintena gracias a los discos de freno cerámicos y las llantas especiales, 15 kg de rebaja eliminando material insonorizante, 4 kg menos debido al escape con silenciador trasero de titanio… Lo que falta hasta llegar a los 100 kg se logra con el techo, el capó y la tapa del maletero realizadas en material plástico reforzado con fibra de carbono.

Como es lógico, las suspensiones se han adaptado para los requisitos de un coche como este, además de añadir refuerzos en la carrocería, como las barras que unen las torretas de la suspensión. Amortiguadores, muelles, estabilizadoras… todo es específico para el CSL, que rebaja la altura de la carrocería 8 mm respecto al Competition Coupé. Tanto la suspensión M adaptativa como la dirección de asistencia variable y los frenos cerámicos son de serie.

Detalles exclusivos para la carrocería y el interior

La verdad es que el BMW M4 CSL no pasa desapercibido ni siquiera en parado. La carrocería va pintada en un exclusivo color gris metalizado con detalles en rojo y partes de fibra de carbono vista; opcionalmente se puede solicitar en color blanco o negro. Si se elige la opción de faros láser, los efectos de bienvenida al abrir las puertas o al encender las luces son en color amarillo en vez de blanco, en referencia a los coches de competición de GT. Por primera vez en un coche de calle, BMW estrena en el M4 CSL una nueva tecnología para los pilotos traseros, utilizando la luz láser para crear una firma distintiva.

En el interior, los asientos pueden regularse en distancia, pero para ajustar la altura hay que recurrir a herramientas o pasar por el taller. Los reposacabezas son desmontables y permiten instalar un sistema de arneses de seis puntos de anclaje. El volante M en Alcantara, el techo en antracita, las molduras de fibra de carbono o los anagramas CSL dejan claro que estamos ante un coche que respira deportividad por los cuatro costados; en la zona trasera se habilita un espacio en el que se pueden guardar dos cascos.

Para el control de los distintos sistemas se incluye el sistema específico M, con un botón de configuración que da acceso directo a los ajustes del vehículo -modos Road, Sport y Track- y dos botones M en el volante que permiten almacenar ajustes predefinidos. El sistema M Drive Professional, con los modos M Dift Analyser y M Laptimer, forma parte del equipamiento de serie. La instrumentación digital se presenta en una pantalla de 12,3 pulgadas, y la pantalla central de 10,2 pulgadas da acceso al navegador y a funciones como el asistente personal inteligente de BMW. Entre las posibles opciones, BMW ofrece una instrumentación Head-up display, o cargador inalámbrico para el móvil.

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