El Nissan Qashqai de 2021 se suma a la lista de automóviles víctimas de la pandemia

La crisis que ha generado la propagación mundial del SARS-CoV-2 trae un día sí y al siguiente también noticias que afectan a las hojas de ruta de los fabricantes automovilísticos y, por ende, a los interesados por el mundo de la automoción, bien sean desde los medios de comunicación, aficionados o posibles interesados en comprar, como es este el caso, el nuevo Nissan Qashqai que verán cómo sus planes para finales de 2020 deben ser aplazados.

En un reporte generado por el diario económico Financial Times y que se basa en la información aportada por 2 fuentes distintas, se afirma que la comercialización del Nissan Qashqai de 2021 se ha visto retrasada, al menos, medio año debido a la dilación en el comienzo de la construcción de las primeras unidades del todocamino líder de ventas, en España, durante los últimos años cosechando un éxito comercial irrefutable desde la aparición del prototipo de 2004 que sentó las bases de la expansión y moda SUV que ilustra este artículo y que ha hecho de este tipo de vehículos de corte montaraz y comportamiento urbanita todo un boom sobre todo, a partir de 2014 en que la actual generación hizo acto de presencia para dar un puñetazo en la mesa.

Sea como fuere y en base a lo publicado, la agenda de Nissan tenía señalado en octubre de este 2020 el día que diera inicio el ensamblaje de las unidades que llegaran a final de año a los concesionarios, hecho que, según parece, hecho que se retrasará hasta mediados del próximo ejercicio, como pronto, a partir del mes de mayo de 2021.

El reajuste provocado por el terremoto que ha supuesto la pandemia de la Covid-19 sería el motivo principal para, de una parte, reflexionar a cerca de los objetivos de la marca y, de otra, reajustar el calendario de 2020 y 2021 en el cual el nuevo Nissan Qashqai habría visto aplazada su fecha de presentación, comercialización, venta y, por consiguiente, el inicio de las entregas de los primeros ejemplares de un modelo llamado a ser, si no el más importante, al menos en el mercado europeo, una de las piezas claves que rescate a la firma nipona de una crisis que sufre desde el escándalo que se destapó tras conocerse la gestión de Carlos Gohsn al frente de las empresas japonesa y francesa.