El mundo de los superdeportivos: ¿Son realmente vehículos polivalentes?

Muchas veces me pregunto cuál es la verdadera utilidad o fin de un superdeportivo -o deportivo- y siempre llego a la misma conclusión: para divertirse. Pero estamos en un punto en el que la industria del motor realiza vehículos con una filosofía de «todo en uno» la cual encaja muy bien, puesto que recurriendo a ella están creando modelos capaces de atender a varias necesidades a la vez. Esto permite a los clientes disfrutar de sus coches en distintas facetas pero ¿sucede lo mismo con los vehículos más radicales?

Al principio de la historia del motor, este tipo de coches se empleaban exclusivamente en el mundo de la competición, mientras que en la actualidad podemos vislumbrar deportivos en prácticamente cualquier situación de la vida. Sin duda alguna, las empresas han hecho un gran trabajo con estos modelos, permitiendo que sean usados para multitud de tareas y, para comprobarlo, vamos a realizar un pequeño análisis.

Siempre se ha dicho que el Audi R8 es uno de los vehículos de su segmento más versátil y cómodo para el día a día. Es cierto que los primeros deportivos contaban con una concepción de vehículo 2+2, cuando a día de hoy la tendencia está en emplear solo dos plazas. Aunque esto no implican que dos pasajeros no puedan viajar cómodamente.

En el interior del R8 nos encontramos con asientos que, sin dejar de ser deportivos y presentar una gran sujeción lateral, son muy cómodos. Esto es un factor muy a tener en cuenta si queremos usar nuestro superdeportivo más allá del circuito. El acceso al interior de este tipo de vehículos si que se convierte en una tarea más tediosa, pese a que en el modelo alemán no es de los peores. Otro factor a tener en cuenta es el sonido del motor que, pese a que el R8 emana una dulce melodía gracias al V10 atmosférico que le da vida, es posible tenerlo bajo control -y en silencio- gracias a los distintos modos de conducción.

Sin embargo, donde si que encontramos un punto débil en este tipo de vehículos es en el consumo, siendo algo terrible en caso de que circulemos fundamentalmente por ciudad. Aunque los clientes de los superdeportivos puedan permitirse su mantenimiento, a nadie le hace gracia tener que pasar por la gasolinera en un periodo de tiempo muy breve. Pero seguimos encontrando elementos a favor de este tipo de vehículos.

Sin disiparnos mucho del segmento, el Mercedes AMG GT presenta un punto muy positivo: su maletero. El deportivo de la firma de la estrella, ofrece 175 litros de almacenamiento, siendo una cifra muy por encima de la media. Esto es gracias a que el poderoso V8 biturbo se encuentra posicionado en el frontal, y nos permite disfrutar de un respetable espacio de carga. Este vehículo también ofrece un habitáculo reconfortante y lleno de la última tecnología, que ofrece al conductor todo lo necesario y más.

Pero en el súmmum de este tipo de vehículos -sobre todo cuando buscamos versatilidad- nos encontramos con el Ferrari GTC4Lusso T, la variante turbo del superdeportivo italiano. Este modelo es capaz de ofrecer cuatro plazas, un maletero considerablemente grande y un poderoso V8 sobrealimentado de más de 600 CV. Sin duda alguna, el Cavallino Rampante tiene todas las de ganar en estos aspectos y, al mismo tiempo, no deja de ofrecer prestaciones de superdeportivo.

Pero, reflexionando sobre la materia en cuestión, podemos encontrarnos con vehículos en el mercado igual de polivalentes -o incluso más- capaces de ofrecer lo mismo a un grado menor. Por lo tanto, continúo considerando que son un tipo de vehículos que cada vez se están adaptando mejor a las necesidades del día a día, pero la finalidad más acertada puede que sea para disfrutar como nunca en un circuito de momento.