El Mini JCW GP ya da fe de su poderío rodando a toda velocidad por Nürburgring

El segmento de los compactos se encuentra a punto de recibir a la nueva generación de uno de los modelos más emblemáticos del siglo XXI, el Mini JCW GP. Esta variante del John Cooper Works debutó en su momento como un vehículo aún más radical gracias a diferentes elementos que heredaba directamente del mundo de la competición y que lo convertían en una extraordinaria máquina de devorar curvas. Ahora, los ingenieros de la firma germana han querido repetir dicha fórmula y, para ello, han recurrido al actual Mini como base primordial para dar vida a la segunda generación del JCW GP y la cual ya ha sido avistada calentando motores en Nürburgring.

Mini ya nos adelantó unos meses la llegada de esta variante tan radical de su compacto a través de unos teaser, pero ha sido en estos vídeos espías donde lo hemos podido ver en todo su esplendor. Es cierto que el camuflaje intenta impedir que apreciemos cualquier detalle de su fisionomía, pero su gigantesco alerón y su tosco sonido hacen que nos percatemos que no se trata de un Mini normal y corriente.

De momento son muy pocos los datos que ha desvelado la marca alemana sobre su inminente nueva incorporación, pero podemos intuir que se han aplicado importantes modificaciones respecto a un Mini estándar. De esta forma, distinguiremos diferentes mejoras tanto a nivel estético como aerodinámico, dos apartados que se verán completados con una generoso incremento de sus prestaciones.

Como hemos mencionado, lo primero que nos cautiva es el exuberante alerón que se posa sobre la zaga del compacto alemán, con el objetivo de ejercer más fuerza aerodinámica y pegar más el coche al suelo. Para cumplir con este mismo objetivo también nos encontramos con unos pasos de ruedas mucho más marcados y que incorporan unos canales para conducir el aire. Al mismo tiempo, la defensa frontal ha sido aderezada por unas tomas de aire mucho más prominentes y un nuevo splitter más agresivo.

Por último, debemos destacar también al difusor posterior, en el que se posa una doble salida de escape central que promete un abrumador sonido y con el que nos deleitan las mulas de pruebas. En lo que respecta al propulsor es todo un misterio, pero podemos esperar que se recurra al mismo motor de cuatro cilindros y 2.0 litros pero siendo capaz en esta ocasión de desarrollar una potencia superior a los 300 CV.

Es así como Mini quiere animar la guerra que se está disputando entre los compactos deportivos, un segmento que experimentará un alto nivel de exclusividad con el JCW GP, una variante que seguramente llegue al mercado como una edición limitada. Todo apunta a que será en la próxima edición del Salón de Frankfurt donde se presente esta versión del compacto germano, permitiendo a sus visitantes apreciar con lujo de detalles al Mini más potente de la historia.