El Mercedes-Benz EQA, el próximo eléctrico de la marca, ya está ultimando su fase de desarrollo

La familia EQ de Mercedes-Benz llegó al mercado con claras intenciones de quedarse y expandirse sin miramientos, tarea que cumplirán con su próximo integrante. Y es que ya se vaticinaba la llegada de un modelo 100% eléctrico basado en el Clase A, idea que se modificó ligeramente al pasar de tener como punto de partida un compacto a un SUV. Los ingenieros de la firma de la estrella decidieron aprovechar el desarrollo de la segunda generación del GLA para concebir a lo que se conocerá como EQA, un modelo que ya se encuentra en su última fase de pruebas.

Pese a que la casa alemana ya cuenta con experiencia en la creación de coches eléctricos, siempre es necesario someter a estos a una serie de pruebas. Y es que los ingenieros de Mercedes-Benz han viajado hasta los lugares más recónditos del planeta en busca de temperaturas extremas y condiciones climatológicas adversas para medir la capacidad del nuevo EQA y conocer los puntos débiles de este.

Concretamente se han traslado hasta Suecia, donde el frío extremo está resultando clave en el desarrollo de este SUV compacto eléctrico. Gracias al clima nórdico, es posible poner a prueba tanto al motor como a la batería, dos piezas claves en los vehículos eléctricos que deben de ser capaces de aguantar todo tipo de adversidades. Al mismo tiempo y con la llegada del verano, los prototipos del EQA viajarán hasta localizaciones donde se alcancen altas temperaturas.

De momento, Mercedes se ha cerciorado de mantener en secreto tanto la estética como el apartado mecánico de este nuevo integrante de la familia EQ. No obstante y teniendo en cuenta que parte del GLA, podemos esperar una serie de rasgos común a nivel de diseño, donde este EQA se diferenciará sobre todo en la zona delantera, puesto que la parrilla estará completamente cerrada.

En lo que respecta al apartado mecánico, podemos esperar que la firma alemana ofrezca diferentes niveles de potencia. Con estos, también variará la autonomía, la cual podría establecerse en unos 300 kilómetros en la variante más modesta y en algo más de 400 en la versión tope de gama junto a potencias de unos 250 y 350 CV.

Todo apunta a que será en el Salón de París de 2020 donde Mercedes-Benz aproveche para presentar a este nuevo vehículo eléctrico. No obstante y para suavizar la espera, la firma de la estrella mostrará en el inminente Salón de Ginebra diferentes modelos que, bajo el apellido EQ Power, contarán con diversas versiones híbridas enchufables e incluso con cierto carácter deportivo.