Jon Olsson le ha cortado el techo a su Mercedes-Benz Clase G 4×4² para convertirlo en todo un vehículo de safari

Ya estamos acostumbrados a que Jon Olsson no solo nos sorprenda con su garaje, sino también con las impresionantes modificaciones que aplica sobre los miembros de este. En esta ocasión, el deportista de élite ha decidido ir un paso más allá con una de sus últimas adquisiciones, un Mercedes-Benz Clase G 500 4×4². Dicha variante se presentó como el súmmum de los 4×4, pero el sueco no ha podido contener sus ansias por lo extravagante y ha decidido cortarle el techo al todoterreno alemán para convertirlo en un vehículo descapotable e idóneo para escaparse de ruta safari y disfrutar en todo su esplendor de sus capacidades fuera del asfalto.

Primero fue el Audi RS6, después el Rolls-Royce Wraith y ahora el Clase G, el cual no solo ha sucumbido ante los cambios estéticos, sino también mecánicos. Con esta premisa, Olsson ha conseguido crear un vehículo prácticamente único en el mundo y capaz de ofrecer unas prestaciones más propias de un superdeportivo que de un 4×4 tradicional.

Recordemos que la denominación 4×4² sobre las carnes del Mercedes Clase G provoca que su lado más campero salga a relucir por doquier. Su estética más abrumadora y su indudable agresividad hacen del todoterreno alemán un vehículo aún más imponente y agresivo, pero Jon Olsson ha querido dejar su firma, su sello personal, y para ello ha decidido convertirlo en un vehículo descapotable.

Una vez que el techo ha sido cortado, los preparadores instalaron varias piezas de madera tanto en las propias puertas como al final del parabrisas delantero, con el objetivo de ofrecer varios soportes. Por motivo de esta modificación, el Clase G de Olsson ha perdido las ventanillas de las puertas y la posterior, provocando que el deportista se mojase en más de una ocasión al no contar tampoco con el techo.

¿Quieres hacerte con un Rolls-Royce Wraith muy exclusivo? Pues estás de suerte, ya que Jon Olsson vende el suyo

El aclamado deportista y amante de los coches, Jon Olsson, ha puesto a la venta a su apreciado Rolls-Royce Wraith, un vehículo modificado y con más de 800 CV.

Después de instalar una jaula alrededor del habitáculo, Jon Olsson ya pudo proceder a colocar la nueva capota, la cual se presenta como tipo lona y se puede recoger y desplegar a placer del conductor. Esto mismo sucede con las ventanillas, las cuales van acopladas al techo al haber vetado la posibilidad de que asciendan desde la propia puerta. Otra de las modificaciones que apreciamos en el G 500 4×4² del deportista sueco es su interior, el cual ha recibido los asientos delanteros y traseros de un Mercedes-AMG A 45.

Esto no solo proporciona más deportividad al conjunto, sino también una mejor visibilidad, puesto la que menor altura de los asientos permite a Olsson observar a través de la luna delantera, ya que su visión se veía obstruida por la pieza de madera. A nivel mecánico nos encontramos con distintas mejoras que provocan que el V8 biturbo de 4.0 litros pase de producir 420 CV a 850 CV, una sustanciosa mejora que hará que el 4×4 de la estrella alcance velocidades inimaginables.