Mercedes-Benz reinventa su estrella de tres puntas

El fabricante alemán ha rediseñado su mítica estrella de tres puntas ya que se está tomando muy en serio su futuro sostenible y, al hacerlo, ha anunciado una nueva campaña que describirá mejor la estrategia empresarial sostenible de la empresa y también reinterpretará el icónico logotipo de estrella de la empresa. Esta campaña llegará a los principales mercados de todo el mundo este febrero y llegará a la televisión, el cine y las redes sociales.

La marca de la estrella quiere que los consumidores sepan cuán dedicado está a reducir su huella de carbono y convertirse en una marca completamente eléctrica para 2030. Esto se suma al lanzamiento del Mercedes-Benz EQE y el EQS. El replanteamiento de la estrella de Mercedes-Benz es el eje de la campaña. Originalmente, fue creada por Gottlieb Daimler para representar la visión de movilidad de la compañía en tierra, mar y aire, y ahora analizará esos roles a través de la lente del conservacionismo y la protección.

Así evolucionará la estrella de Mercedes-Benz

Bettina Fetzer, vicepresidenta de Comunicaciones y Marketing, ha apuntado que «hoy, como entonces, la estrella representa nuestra historia única, el espíritu pionero que caracteriza a la marca y la fuerza innovadora constante que hace posible el comienzo de una nueva era de movilidad. Esto se ilustra con el eslogan ‘Es una señal de nuevos tiempos’. La campaña una vez más visualiza que, para nosotros, el lujo y la sostenibilidad van de la mano, sorprendiendo con carisma emocional».

Este cambio se integra en el gran plan Ambition 2039 de la compañía que hará que se convierta en carbono neutral en toda la cadena de suministro del fabricante de automóviles. Esta neutralidad de carbono no se detiene solo en la empresa, el objetivo es que para ese año todos los materiales de proveedores externos también sean neutrales en carbono, lo que significa que todos los pasos del proceso de ensamblaje proteja el medio ambiente.

Así mismo, Mercedes-Benz quiere poder reutilizar y reciclar las innumerables cantidades de baterías de los sistemas de propulsión que comenzará a producir para ayudar a cerrar el ciclo y conservar los recursos. Esto es parte del objetivo de tener un 40% de materiales reciclados en los vehículos para 2030 para conservar los recursos primarios.