Mercedes avanza el diseño del Clase S Cabrio

Fotos espía e información filtrada con cuentagotas han diluido el suspense acerca de la próxima carrocería que engrosará la gama del Mercedes-Benz Clase S generación 222. Pero el fabricante de Stuttgart no había confirmado oficialmente el regreso de la variante descapotable hasta ayer, cuando publicó en su perfil de Instagram la primera imagen, un dibujo hecho por ordenador, con la que lo anunciaba.

El Clase S Cabrio, código interno A 217, se espera que aparezca en septiembre en el Salón del Automóvil de Fráncfort. El adelanto virtual de este domingo corrobora, como ya se intuía por las unidades de prueba camufladas, que únicamente se distinguirá del Clase S Coupé por la ausencia del techo.

En su lugar se colocará otro de tela retráctil compuesto de varias capas y con un cristal posterior que mejore el aislamiento térmico. Cuando la capota esté presente, su línea se aproximará en gran medida a la del Clase S Coupé, aunque la caída de la trasera será menos pronunciada debido a que cubrirá el espacio donde se almacena al plegarse.

La carrocería cerrada le prestará todos los motores, incluidos los preparados por AMG, y las tracciones trasera y total 4MATIC. A diferencia del Clase S Coupé, esta alternativa de modo de propulsión constituirá un hito en la historia del modelo más lujoso de la casa alemana. Será la primera vez que un descapotable de Mercedes-Benz de este tipo cuente con un sistema que envíe la fuerza del motor a las cuatro ruedas.

También supondrá la reincorporación de la marca a un nicho de mercado que abandonó en 1971 al dejar de fabricar el 280 SE 3.5 Cabriolet W 111 en julio de aquel año. El Mercedes-Benz SL ha funcionado de alguna forma como un reemplazo de descapotable de gran lujo, pero la empresa necesitaba un producto más apropiado con el que responder a rivales como el Bentley Continental GTC o el nuevo Rolls-Royce Dawn, la versión descapotable del Wraith.

Fuente | Mercedes-Benz