Marchionne recuperará primero la imagen de Alfa Romeo en América
Suena paradójico pero al consejero delegado y presidente del Grupo Fiat no le faltan razones para esta drástica decisión que ha tomado. Ojo, no es que el biscione no tenga ya solución en el viejo continente, sino que según Marchionne ésta será más fácil de poner en práctica en el próximo mercado en el que […]
Suena paradójico pero al consejero delegado y presidente del Grupo Fiat no le faltan razones para esta drástica decisión que ha tomado. Ojo, no es que el biscione no tenga ya solución en el viejo continente, sino que según Marchionne ésta será más fácil de poner en práctica en el próximo mercado en el que entrará Alfa Romeo. Y como primera medida que va a tomar de este cambio de estrategia está el nuevo nombramiento en la marca italiana.
El ejecutivo ha anunciado que antes de que termine el 2011 habrá un directivo de la nueva división norteamericana de una de las «facetas deportivas» del Grupo Fiat. Según unas declaraciones que dio en una entrevista la semana pasada en Turín, «primero vamos a dirigirnos al mercado estadounidense y después trabajaremos la vuelta a Europa«.
Lo que puede que a algunos les choque más es uno de los argumentos en los que se basa el Grupo Fiat para dar ese paso: «Hemos llevado a cabo estudios de mercado sobre la apreciación de Alfa Romeo en Estados Unidos (a pesar de la larga ausencia de esta en ese país), de los que se concluyó que sigue viéndose como una de las mejores marcas del mundo, y creo que debemos regresar allí y aprovecharlo», comentó Marchionne en la entrevista.
Es evidente que el ejecutivo peque de un ligero exceso de optimismo sobre esa perspectiva de Alfa Romeo. Pero esta marca arrastra en Europa una falta de credibilidad general a causa de la mala calidad de varios modelos que no correspondía con lo esperado de la firma, unos motores anticuados no demasiado evocadores del espírituo del «cuore sportivo» y unos diseños que el Grupo Fiat no actualizó con la frecuencia adecuada. Más de un Alfista terminará por desesperarse si los europeos vemos demasiado tarde productos prometedores como el 4C o el Giulia.
Vía | Automotive News
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