La llamada a revisión del Hyundai Kona EV por riesgo de incendio afectará al modelo a escala global

¿Qué tienen en común Canadá, Australia y Corea del Sur? Pues que en dichas naciones han visto cómo al menos una unidad del Hyundai Kona EV ha sufrido una combustión espontánea. Los tres incidentes han sido investigados y, finalmente, dado que se ha encontrado un culpable que afecta a la fabricación de cualquiera de las unidades puestas a la venta del vehículo a nivel mundial, el constructor surcoreano ha decido ampliar la llamada a revisión del Hyundai Kona eléctrico desde el ámbito local a uno global.

Así, de los más de 25.000 ejemplares que, en un principio, el fabricante había establecido convocar para una operación de evaluación que afecta a la batería, pasa a afectar en total a, al menos, 77.000 unidades las que sean convocadas por esta llamada a revisión del Hyundai Kona EV.

Según la información facilitada, la marca tiene localizado el causante del fallo que podría derivar, en un caso extremo, en riesgo de ignición y, por probabilidad remota, en un incendio del Hyundai Kona eléctrico.

Una realidad cuyo origen no ha sido esclarecido

El defecto podría residir en la fabricación del acumulador eléctrico insertado en el automóvil, cuyo responsable es el especialista y proveedor de baterías para diferentes marcas y modelos, LG Chem, pero esta empresa niega su responsabilidad en cuanto a que tal problema pueda provocar el fuego que ha calcinado ya tres vehículos y, de hecho, ha admitido el defecto pero no sus consecuencias argumentado que, según sus simulaciones, este defecto no podría acabar provocando un incendio.

Sea como fuere, con el trío de coches eléctricos anunciados al inicio que fueron pasto de las llamas se inició la investigación que ha derivado en una llamada a revisión del Hyundai Kona EV que supondrá la comunicación por parte de las delegaciones nacionales de los automóviles ya comercializados.

En un primer momento serán los automóviles coreanos puestos en el mercado nativo los que pasen a ser convocados, no se ha confirmado aún cuándo se hará lo propio respecto de otras áreas clave en la venta del SUV eléctrico de la marca como son el estadounidense y el europeo.

Como siempre sucede en estos casos, el fabricante pide a los clientes calma y que esperen a que sean convocados por parte de los servicios de posventa para realizar la inspección y, de ser necesario, podría llegar a requerir el cambio de la batería del Hyundai Kona EV. Como ya señalamos en el artículo, mientras esto sucede, es posible conocer si una llamada a revisión afecta a nuestro vehículos.

En el supuesto de que este problema derive en un reemplazo masivo de todos los acumuladores, la llamada a revisión del Hyundai Kona EV podría suponer un coste de más de 440 millones de euros al fabricante, según ha cuantificado una empresa especialista.