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Koenigsegg Hundra: 1044 caballos y oro en el Salón de Ginebra
El Salón de Ginebra también ha dado pié para coches curiosos, como el Koenigsegg Hundra, el coche número 100 que ha construido Christian von Koenigsegg, destinado a un coleccionista. El Hundra sube un poco la potencia del Agera S original y viste de carbono y oro de 24 kilates, distribuido en toda la carrocería e interior. Se dice que ha costado 1,3 millones de euros.
A lo largo de nuestra visita al Salón de Ginebra nos hemos encontrado con coches raros, conceptuales de todo tipo y los deportivos de pequeñas casas preparadoras que te dejan con la boca abierta. Entre ellos, está el fabricante sueco Koenigsegg, conocido por su Agera S, que ha sido capaz de batir récords mundiales de velocidad. Lo que se traía entre manos Christian von Koenigsegg en Ginebra, era un modelo muy especial de celebración.
Os lo mostramos en vídeo a principios de esta semana, a punto de comenzar el salón. El Koenigsegg Hundra es el modelo número 100 que ha fabricado la pequeña casa sueca. Pareciera que no es un gran logro luego de 10 años de estar en el círculo tan exclusivo en el que se mueven estos deportivos suecos, pero no podíamos dejar pasar el Hundra (palabra sueca que significa «cien») por todo lo que ofrece.
El Hundra es un encargo especial de un cliente de Hong Kong, quien ha autorizado a Koenigsegg a mostrar en público este modelo, basado en el Agera S. Si su hermano alcanza los 1030 caballos y los 1000 Nm de torque, este nuevo integrante de la familia sube el listón de potencia a 1044 caballos, gracias al mismo motor V8 con doble turbo, y una caja automática de doble embrague con 7 velocidades. Semejante despliegue de caballería lo sitúa con una aceleración similar al del Lamborghini Veneno, en los 2,8 segundos para llegar a los 100.
Todavía nos falta mencionaros algo que diferencia a este deportivo, del resto de modelos vistos en Ginebra. No es el carbono que está presente hasta en el rincón más inesperado de todo el coche, sino en el uso de láminas de pan de oro de 24 kilates, que comparten con el carbono un lugar. Las inserciones de oro están distribuidas por toda la carrocería, las llantas y el vano motor. El interior es un concierto a tres voces del carbono, el mismo oro y el cuero Alcántara.
De acuerdo a algunos rumores, el precio de venta del Hundra ha sido de 1,3 millones de euros, pagados por un coleccionista. Sin duda, alguien que se encargará de mantener al Hundra bien guardado, en previsión de raspones o intentos de los amigos de lo ajeno de «llevarse un recuerdo de oro» del coche.
Vía | Km77
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