Kia Sorento PHEV, el único SUV híbrido enchufable 7 plazas de su categoría

Tras 18 años en el mercado, el Sorento, con más de 37.000 unidades vendidas desde su lanzamiento en España y 3.000.000 en todo el mundo, muestra un salto cualitativo respecto a las generaciones anteriores. La nueva edición del modelo crece ligeramente -10 mm en longitud, anchura y altura-, reduce sus voladizos y aumenta la distancia entre ejes en 35 mm para mejorar el espacio interior, que cuenta con tres filas de asientos. Ofrece hasta siete plazas en su interior, único modelo de la categoría con estas características.

El Kia Sorento PHEV, nuevo miembro desarrollado sobre la cuarta generación del modelo, combina un motor de gasolina 1.6 turbo de 180 CV con una batería de 13,8 kWh y un motor eléctrico de 66,9 kW, lo que facilita la posibilidad de realizar recorridos de hasta 57 km en modo exclusivamente eléctrico. La plataforma que emplea, N3 SUV, permite la adaptación de motores “Smartstream” de combustión, híbridos e híbridos enchufables, las tres tecnologías con las que se ofrece en la actualidad.

Con la nueva versión, el Sorento PHEV se convierte en el vehículo con menores emisiones de la gama y también el más potente. Gracias al conjunto de motores y batería, es capaz de suministrar una potencia conjunta de 265 CV y 350 Nm de par. Además, dispone de un sistema de refrigeración por agua para mejorar el rendimiento del equipo eléctrico.

Como la batería no ocupa mucho espacio en el maletero, anuncia unas cifras de capacidad destacables: 175 litros con 7 plazas y 604 litros si se utilizan cinco plazas, es decir, cuatro litros menos que en el híbrido y 12 menos respecto a las versiones de combustión.

Pocas diferencias estéticas

La variante PHEV apenas se diferencia estéticamente de sus hermanos de gama. Tan solo el emblema «Eco plug-in», la toma de carga en la aleta trasera y unas llantas de 19 pulgadas se diferencian del resto de versiones.

Cuenta con tres filas de asientos, todas ellas con sistema de climatización y buen acceso, aunque la última se encuentra limitada a ocupantes de menor talla, pues la banqueta, aunque se encuentra en una posición bastante baja, no facilita la comodidad a usuarios por encima de 1,75 m de estatura.

En el interior se ha rediseñado la instrumentación digital, que cuenta con nuevos gráficos y pantalla de 12,3”. Permite conocer el estado del sistema de propulsión, el estado de carga de la batería, así como del flujo de potencia de los motores eléctrico y térmico. La pantalla central de 10,25”, centrada en la información del equipo de sonido y navegación, permite ahora localizar los puntos de carga en el mapa, integración con Apple CarPlay y Android Auto, etc.

También incluye el sistema UVO Connect de Kia Fase II con servicios de Kia Live sobre estado del tráfico en tiempo real, previsiones meteorológicas, puntos de interés, situación del vehículo en cualquier momento, control y programación de la carga de la y localización de plazas de parking disponibles.

Gran equipamiento

En materia de seguridad no escatima ayudas, ofreciendo algunos sistemas como el asistente de colisiones frontales con detección de peatones, ciclistas y vehículos;  el detector de vehículos en cruces, monitor de ángulo muerto y de visión del entorno; el control de crucero Inteligente con función Stop&Go, el asistente de carril, además de monitor de visión para evitar colisiones en marcha atrás y por tráfico cruzado o la asistencia para salida segura, que evita que las puertas traseras se abran si se detecta que un vehículo  se aproxima por detrás.

Está disponible en dos niveles de equipamiento, denominados Drive y Emotion. El primero de ellos ya incluye siete airbags, faros led, navegador GPS, botón de arranque con llave inteligente, asiento del conductor regulable eléctricamente con ajuste lumbar, sensores de aparcamiento delanteros y traseros o climatizador bizona.

El escalón siguiente, Emotion, añade el sistema de detección de ángulo muerto con monitor en el panel de instrumentos, asistencia de prevención de colisión en salida de aparcamiento, techo solar panorámico, sistema de audio premium, cámara de visión 360º, volante, asientos delanteros y traseros calefactables, portón trasero de accionamiento eléctrico automático y cargador inalámbrico por inducción.

En opción, sobre el acabado Emotion, se ofrece el Pack Luxury, que incluye estriberas laterales, pedales deportivos, Head-Up display, tapicería en piel napa, asiento del pasajero regulable eléctricamente con ajuste lumbar, asiento del conductor con función de memoria, y asientos delanteros ventilados, que tiene un precio de 3.600 euros adicionales.

Bajo consumo

Cuenta con motor de gasolina 1.6 que se encuentra apoyado por otro eléctrico de 66,9 kW (91 CV) y 304 Nm de par, alimentado por una batería de 13,8 kWh y 360 V. Están asociados a una caja de cambios automática de seis velocidades con levas en el volante. Solo se encuentra disponible en configuración de tracción total, con posibilidad de seleccionar diferentes modos de conducción: Eco, Sport y Smart, que modifican los parámetros de gestión y entrega de la potencia.

También ofrece un selector de conducción Terrain Mode para diferentes terrenos, Snow, Mud y Sand, para circular por nieve, barro y arena, que actúa sobre el reparto de par al eje trasero, la presión de los frenos, la entrega del par motor y la gestión del cambio de marchas.

En cualquiera de los modos, la entrega de energía eléctrica aporta una buena dosis de par y permite mejorar las prestaciones, especialmente en aceleraciones y recuperaciones, pues la velocidad máxima es inferior a la de las versiones con motor exclusivamente de combustión. No obstante, permite el funcionamiento en modo eléctrico exclusivo en muchas ocasiones y regenera energía en las deceleraciones y frenadas con mucha eficiencia.

En modo eléctrico homologa un consumo de 18,4 kWh/100 km que, en conjunto con el uso del motor de gasolina, rebaja el consumo medio a 1,6 l/100 km. Es cierto que este dato sería válido para los 100 km iniciales en el mejor de los casos, pero en realidad, viajando con cierta precaución, se pueden lograr consumos reales inferiores a los 7 l/100 km, cifra que no está nada mal para un modelo de estas características, con dos toneladas de peso y 4,8 metros de longitud.

Para reducir el consumo energético cuando no es necesario, se ha incorporado un botón de climatización que permite dirigir y canalizar el sistema únicamente al conductor, de forma que no se pierde energía en climatizar el resto del habitáculo.

En cuanto al tema de la carga eléctrica, no presenta ningún tipo de dificultad, ya que la potencia del cargador embarcado que integra es de 3,3 kW, por lo que puede alimentarse de un enchufe doméstico tipo Schuko (de serie incluye cable Schuko-Mennekes), lo que llevaría un tiempo máximo de cinco horas para completar el proceso. En caso de cargarse en un punto tipo Wallbox o un enchufe reforzado a 16 A, el tiempo de carga se reduciría a 3 horas y 25 minutos.

Buen comportamiento

La conducción del PHEV no plantea ningún tipo de complicación, más allá de la que implican sus dimensiones y peso, pero, en cualquier caso, se muestra bastante ágil y dinámico. No resulta incómodo de suspensión, pues el tarado de las mismas no es especialmente firme, pero sí se muestran efectivas para contener los balanceos de la carrocería.

Jugando bien con las deceleraciones y frenadas, aprovechando las condiciones del terreno por el que se circula, es posible lograr un buen nivel de regeneración de energía para preservar o aumentar la carga de los acumuladores, algo que no es posible con otros sistemas de propulsión mediante motores de combustión.

Ha perdido algunas aptitudes todo terreno respecto a las ediciones precedentes, eso es indudable, aunque tampoco es el cometido principal del modelo. No obstante, la posibilidad de contar con sistema de tracción a las cuatro ruedas y los modos de funcionamiento que proporciona el dispositivo Terrain Mode, facilitan la circulación cuando las condiciones de adherencia no son favorables.