El KIA EV9 ya ha pasado todas las pruebas previas a su comercialización

Antes de poner en el mercado un modelo nuevo de coche, la marca se encarga de hacer pasar a este por todas las pruebas posibles. Se trata de la manera que tiene el fabricante de poner al coche en todas las situaciones que se puedan imaginar para que demuestre que puede funcionar sin problemas ante cualquier imprevisto y en todas las condiciones atmosféricas o por cualquier tipo de terreno al que se encuentre en su día a día.

Estas pruebas son muy duras y llevan al modelo a enfrentarse a unos tests que ponen al límite, e incluso le hacen sobrepasar estos. Es lo que acaba de experimentar el Kia EV9, el nuevo SUV eléctrico de la marca coreana que se comenzará a comercializar el próximo año 2023.

Casi cuatro años de desarrollo

El Kia EV9 ha necesitado 44 meses de desarrollo. Durante este tiempo se ha diseñado y desarrollado un vehículo destinado a ser el buque insignia de la compañía coreana. Para ello se han establecido nuevos estándares en cuanto a diseño, rendimiento, autonomía, dinámica de conducción, tecnología y confort.

Todos estos aspectos han sido sometidos a estos tests, que han demostrado que pueden ser muy duraderos incluso en las condiciones más exigentes. Las últimas puebas se han realizado en el centro global de I+D de Kia en Namyang, Corea.

Entre los retos que ha tenido que superar con éxito el EV9 en esta pista se incluye un terreno de vadeo en aguas profundas, un circuito con rampas pronunciadas para vehículos 4×4 y otro en el que el firme está diseñado para presentar un terreno agreste y repleto de baches y zonas complicadas.

En los circuitos de alta velocidad se han calibrado otras características del SUV eléctrico, como la prestación y el agarre del modelo. Los adoquines de la llamada pista belga ayudan a los ingenieros de Kia a poner a punto el coche para que el confort a bordo y la calidad de construcción sea el correcto y no presente ni un solo problema.

Además del centro de I+D de Kia de Namyang, el EV9 ha viajado por otros países del mundo para ponerse a prueba en distintos escenarios. El modelo utiliza el lenguaje de diseño Opuestos unidos, que será el que marcará el camino a partir del próximo año. La plataforma sobre la que se monta este innovador SUV es la E-GMP, que será la que servirá de base para futuros vehículos eléctricos de Kia.