Jaguar en el Salón de Frankfurt 2015

Jaguar ha llegado pisando con fuerza al Salón de Frankfurt 2015, y lo ha hecho con dos grandes novedades, el Jaguar F-Pace y el Jaguar XF. La principal propuesta de la marca británica es el Jaguar F-Pace, el primer SUV que lleva el emblema del felino y del que hemos ido viendo algún adelanto a lo largo de los pasados meses. Este modelo representa una apuesta fuerte de la marca, ya que sabemos que los SUV están siendo una de las gamas más buscadas por los compradores.

El Jaguar F-Pace cuenta con todos los elementos que se pueden esperar en un coche de esta marca. El confort, el lujo y la exclusividad son una constante en Jaguar y el F-Pace cuenta también con todo ello a bordo. Los acabados de calidad permiten a los ocupantes del SUV poder llegar hasta los puntos más complicados y con toda la comodidad que aporta Jaguar.

El segmento de los SUV es uno de los populares y ya sabemos que los futuros compradores lo tienen en su punto de mira, por el prestigio y la calidad que suelen ofrecer. Jaguar quiere apostar por este segmento y desde luego con F-Pace no se va a quedar atrás, buscando a los aficionados de este tipo de vehículos pero en la gama más alta. Un espacio amplio, tanto en las plazas delanteras como en las traseras y pequeños detalles como el respaldo del asiento ajustable permite que ningún terreno evite viajar con comodidad.

Los motores que le permiten afrontar los distintos retos a los que se enfrenta son cuatro. El nivel de entrada lo marca un motor 2.0 litros diésel que aporta 180 caballos. El segundo propulsor es de 2.0 litros de gasolina de 240 caballos que en España solo estará disponible con la tracción total. Los otros dos motores diésel aportan 300 CV y 380 CV en el tope de gama.

En el interior vamos a encontrar una pantalla de 10,2 pulgadas que gestiona de manera muy eficiente el sistema InControl Touch Pro premium. Además, permite conectar hasta ocho dispositivos gracias al Wifi que equipa, algo que también va a gustar a los que buscan un SUV completo.

Una pulsera que se puede llevar en la muñeca para que se bloquee el acceso sin necesidad de llaves. La pulsera emite una señal y permite el acceso. La cámara esteroscópica que equipa en la parte frontal puede detectar a peatones y funciona activando el freno de emergencia si es necesario.